El pregonero de Vilafranca del Penedès ha cabreado la prensa española, cuando al final de su discurso de este miércoles noche ha gritado: "¡Puta España!". "Que la fiesta nos sirva de energía positiva para que durante todo el resto del año podamos soportar este capitalismo que nos asfixia. ¡Buena Fiesta Mayor y puta España!", ha dicho el pregonero de este año, Otger Amatller, para acabar el pregón de Sant Fèlix —acompañado de música festiva y una estelada roja—. Amatller es un psicólogo especializado en el tratamiento y prevención de drogodependencias que entre los años 2003 y 2009 fue concejal de la CUP en el Ayuntamiento de Vilafranca.
Algunos usuarios de Twitter han difundido la parte final del discurso, emitido por RTV Vilafranca. Un puñado de medios de comunicación españoles lo han visto y se han enfadado, tildando de "polémico" el mensaje final transmitido por el pregonero. Por una parte, Crónica Global ha reprochado a Amatller que "el protagonismo de la fiesta no es para los bailes ni para la más que conocida agrupación de castells". De otra, La Razón se ha expresado en términos similares: "Vilafranca del Penedès estos días está celebrando la festividad de Sant Fèlix, una de las fiestas más importantes en Catalunya. Sin embargo, hasta ahora, el centro de atención de la fiesta ha sido la lectura del pregón".
En el caso de Marca, el medio de información deportiva ha asegurado que las declaraciones "han levantado ampollas" y las han calificado de "impactantes. Por su parte, El Catalán ha cargado contra los socialistas: "El PSC permite que el pregón de Vilafranca del Penedès se lleve a cabo con una estelada y un «Puta España»". Actualmente, el alcalde es Francisco Romera, del PSC. Hay que decir que los medios han puesto de relieve que Amatller había sido escogido "por ser una persona sociable, conciliadora y con muy buena capacidad comunicativa" y han recordado el caso de un profesor que mezcló el caso de las enfermeras y el nivel C1 de catalán con el "Puta España".
Según RTV Vilafranca, el pregón de Amatller ha sido largo (de más de una hora) y ha estado lleno de reivindicación tanto política como social. Ha enviado un mensaje crítico con la sociedad consumista e individualista, que abandona el medio ambiente y mujer aire a la extrema derecha. Así, ha recordado su participación en entidades de la izquierda independentista y reivindicó el 1-O, reconociendo que el independentismo no pasa por el mejor momento. Sin embargo, ha transmitido un mensaje de esperanza y ha dicho que devolvería el buen viento, en el momento que colgó la estelada.