Toni Comín no está en la mesa de negociación de la investidura, pero sin duda es un observador privilegiado. El eurodiputado y vicepresidente del Consell de la República fue entrevistado ayer el programa Más 3/24 para explicar la importancia de la Identidad Digital, el encaje de un posible Estado Mayor en este organismo y los flequillos por atar en las negociaciones entre Junts y ERC. Y a pesar de reivindicarse como un simple observador, en este punto fue especialmente concreto: si Esquerra no acepta la hoja de ruta de Junts, es muy posible que los de Carles Puigdemont queden fuera del ejecutivo.
De esta manera el exconseller de Salut daba validez a las declaraciones de Jordi Sànchez, secretario general de Junts, desmintiendo que sean un "farol". "Junts ha aceptado que el plan A sea el programa electoral de Esquerra, la mesa de diálogo con el Estado, e incluso lo ha hecho la CUP. Eso está claro, ¿pero el plan B cuál es? Es muy difícil que pueda haber un acuerdo integral si no se llega a un pacto con respecto a este punto", explicó.
Enfoques diferentes pero compatibles
"Si ERC no acepta como plan B la hoja de ruta de juntos, el desbordamiento democrático y la unilateralidad, es muy difícil el acuerdo. Pero mi convicción es que son compatibles", reivindicó Comín durante la entrevista.
Según el eurodiputado, tan lícito es considerar que la confrontación con el estado es el único camino para la independencia, como pensar aceptar que este enfoque comporta grandes riesgos. Con todo, recalcó que seguir la primera vía sin una estrategia alternativa puede querer decir renunciar a la independencia. "¿Si renunciamos a tener un plano B, estamos seguros de que con la mesa de diálogo, teniendo en cuenta la correlación de fuerzas actuales, conseguiremos un referéndum acordado? ¿El reconocimiento por parte del Estado español del autodeteminació?", señaló.
El Consell per la República, preparado para integrar un Estado Mayor
Sobre el Consell de la República, Comín negaó que intente asumir competencias de la Generalitat de Catalunya. "Soy el primero que considera que la figura del presidente de la Generalitat de Catalunya es indelegable, a pesar del bajo nivel de competencias del cual dispone. Y eso no es menospreciar la institución, sino llamar a las cosas por su nombre", explicó. En este sentido, defendió que la voluntad del Consell de la República es "suplir" a la Generalitat en aquellos ámbitos donde no tiene competencias a raíz de las limitaciones que supone el Estatuto.
Con respecto al Estado Mayor, defendió que el Consell está preparado para asumir el encaje, después de negociar las relaciones entre los órganos ya existentes, la Asamblea y el Consell per la República, y la manera como responden entre ellos. A pesar de todo, recalcó que primero se tiene que tener claro el objetivo del Estado Mayor, en caso de llegar a crearse. ¿La pregunta es, lo pondremos a favor de la estrategia del Consell? Entonces tiene que estar integrado en él. Pero si no tiene que ir a favor de esta hoja de ruta, quizás no hay que crearlo. ¿Por qué queremos un Estado Mayor si no es para un embate democrático?".
Con respecto a la polémica en torno a la Indentitat Digital, Comín defendió el valor político del identificativo. "Te identifica como miembro de un ente que tiene voluntad de institución pública, ya que su misión es intentar culminar el mandato democrático del 1-O", dijo.