La demanda del gobierno de Pedro Sánchez para que, ahora sí, el espionaje del Pegasus acabe ante la justicia es una reacción inversa a la que tuvieron con el CatalanGate. Uno de los primeros en lanzar una pregunta abierta desde twitter al PSOE ha sido el abogado del president Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, que también fue espiado: "¿Ahora sí nos creemos 'a la madre de todas las cloacas'?, ha escrito con ironía.
El mismo Boye era el que avisaba la semana pasada que las declaraciones de la ministra de Defensa, Margarita Robles -hoy según La Moncloa espiada-,estana intentado justificar el CatalanGate, y este podía ser considerado de delito fuera del Estado español. "Más de un juez pensará que eso es delito, por una sencilla razón, porque lo es. Es un delito de manual, que da poco margen a la interpretación. La gravedad de los hechos es importante", advertía el abogado que es uno de los afectados, igual que Andreu Van den Eynde, abogado de Oriol Junqueras y los dirigentes republicanos; Antoni Abat, abogado de los espiados de la ANC; o Benet Salellas, responsable de la acusación de los afectados de Òmnium y la CUP.
Por otra parte, en una entrevista este pasado fin de semana, Boye argumentaba que ellos sí tienen pruebas del espionaje que sufrieron. "Hay pruebas periciales al respecto". En este sentido, ha remarcado que queda para determinar quién lo ha ordenado, quién lo ha pagado y de dónde lo ha pagado. "El hecho del espionaje no es presunto, sí que lo es la autoría", ha advertido.
En paralelo, el president Carles Puigdemont también ha sido de los primeros en reaccionar. "La Moncloa ha tenido que esperar a que hubiera una infección con Pegasus en los móviles del presidente del gobierno y de la ministra de defensa para considerar que es un asunto de extrema gravedad e investigarlo. Cuando lo denunciábamos los catalanes no merecíamos tanta consideración". Aunque también ha mostrado su solidaridad hacia Sánchez y Robles: "La violación de la intimidad de Sánchez y la ministra Robles es un crimen gravísimo que amenaza la democracia. Mi solidaridad con ellos, como víctimas, y mi máxima exigencia hacia ellos, como responsables de no haber hacer nada hasta el estallido del CatalanGate".
Borràs: "No cuela"
No hace ni una hora que se ha celebrado la rueda de prensa donde Bolaños era quien daba la noticia de tener constancia de un espionaje hacia el presidente español y la ministra de Defensa. A pesar de todo, la avalancha de reacciones no se detiene. La presidenta del Parlament, Laura Borràs, lo tilda de oportunismo: "Sánchez y Robles dicen ser espiados. ¿Ahora sí que es un tema muy grave, cuando sólo afectaba al independentismo, la ministra lo justificava. Es la evidencia de que no hay que limpiar las cloacas por si las puedes usar? ¿O una maniobra para pasar de verdugos a víctimas? ¿Bye CatalanGate? No cuela".
También la actual consellera de Universitats, Gemma Geis, que da un matiz: "El Centro Criptológico Nacional está adscrito al CNI. Comparten medios, como se detalla en la propia web y de acuerdo a la normativa aplicable. No se puede negociar con quien hace ver que no controla los poderes del estado".