La defensa de los eurodiputados de Junts Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí se prepara para una batalla judicial de un año en el Tribunal de Justicia de la Unión Europea antes de enfrentarse a la euroorden en Bélgica y Escocia. "Los tribunales belgas esperarán hasta que Luxemburgo se pronuncie", asegura el abogado flamenco, Paul Bekaert, en declaraciones a la ACN, preguntado por las prejudiciales que el Tribunal Supremo ha hecho al TJUE.

El abogado escocés de Ponsatí, Aamer Anwar, incluso apunta que los tribunales de Escocia se esperarán a que Luxemburgo resuelva el recurso que presentarán contra el levantamiento de la inmunidad. De todos modos, el equipo jurídico admite la dificultad de ganar este caso.

El abogado flamenco Paul Bekaert / ACN

"Un caso difícil"

"Es un caso difícil", reconoce Bekaert, si bien recuerda que en el caso de Oriol Junqueras el TJUE contradijo la Eurocámara. La defensa de los tres independentistas presentará un recurso a los tribunales de la UE contra la decisión de la Eurocámara junto con una petición de cautelares.

Anwar denuncia las "irregularidades" de la gestión del suplicatorio como la aprobación de un informe con errores sobre los delitos por los cuales se acusa su cliente. También critica que el Comité de Asuntos Jurídicos que redactó la propuesta de levantamiento de la inmunidad no fue "imparcial". "Ponsatí continuará luchado", asegura.

El abogado Aamer Anwar con Clara Ponsatí / EFE

Las preguntas de Llarena

Como se esperaba, el magistrado del Supremo Pablo Llarena ha enviado siete preguntas prejudiciales al TJUE para aclarar el futuro de las euroórdenes a raíz de la denegación de Bélgica a la entrega del exconseller Lluís Puig por riesgo de vulneración de los derechos fundamentales.

En concreto, la justicia belga determinó que en el caso del 1-O no se respeta el derecho al juez natural ni la presunción de inocencia basándose, en gran parte, en la resolución del Grupo de Trabajo sobre las Detenciones Arbitrarias de la ONU.

Llarena pregunta a Luxemburgo, entre otras cuestiones, hasta qué punto los tribunales belgas pueden cuestionar su competencia en la causa del procés y si pueden declarar la existencia de un riesgo para los derechos fundamentales "a partir del informe" del Grupo de Trabajo de la ONU. "Constituye este informe un elemento objetivo, fiable, preciso y debidamente actualizado para justificar (...) ¿la denegación de la entrega"?, se pregunta Llarena.

Las euroórdenes, paralizadas un año más

La defensa de Puigdemont prevé que estas prejudiciales mantengan las euroórdenes paralizadas un año más en Bélgica y Escocia. Desde finales del 2019 estaban suspendidas a la espera de la resolución sobre el suplicatorio. Ahora que la Eurocámara ya ha levantado la inmunidad a los tres eurodiputados de JxCat, el Tribunal Supremo tiene previsto comunicarlo a las autoridades belgas una vez tenga la notificación oficial del presidente del Parlamento Europeo.

Toni Comín, Carles Puigdemont y Clara Ponsatí en el Parlamento Europeo después de conocer el resultado del suplicatorio / EFE

Independientemente de si la justicia belga reabre o no el caso por la pérdida de protección parlamentaria, los abogados de Puigdemont, Comín y Ponsatí anticipan que el proceso de extradición continuará parado mientras el TJUE no resuelva las prejudiciales de Llarena.

"Hasta que Luxemburgo no diga la suya, no pasará nada", avanza Bekaert, sin descartar que los jueces europeos puedan emitir una opinión "diferente" a la de los belgas -es decir, que tumbe los argumentos por los cuales se rechazó la euroorden de Puig.

En tal caso, podría afectar al criterio de Bélgica y Escocia para resolver el caso de Puigdemont, Comín y Ponsatí con respecto a la cuestión de los derechos fundamentales. En cambio, para Puig el Supremo tendría que emitir una cuarta euroorden porque no se puede reabrir el caso, según Bekaert.

Aparte de la cuestión de los derechos fundamentales, Bélgica y Escocia también tendrían que decidir si pueden aprobar la extradición de Puigdemont, Comín y Ponsatí por el delito de sedición, ya que Puig sólo está acusado de malversación y desobediencia.

Los exiliados, "en el lado bueno de la historia"

"Cuando se trata del derecho europeo y los derechos humanos, Ponsatí, Comín y Puigdemont están en el lado bueno de la historia, esperamos que los tribunales también lo estén", añade el abogado Aamer Anwar.

Con todo, los abogados recuerdan que es pronto para prever el desenlace en los tribunales europeos y se abstienen de entrar en detalle sobre elementos en juego en Luxemburgo. "No avanzaremos nuestra estrategia judicial", dice Anwar.

Imagen principal: El presidente Carles Puigdemont en una rueda de prensa desde el Parlamento Europeo / EFE