Nuevo presidente autonómico que blasfema de la financiación singular para Catalunya después de pasar por el despacho de Pedro Sánchez. El jefe del ejecutivo de Aragón, Jorge Azcón, ha denunciado este jueves ante el presidente del Gobierno la "financiación privilegiada" que recibirán los catalanes si se acaba haciendo realidad el pacto entre ERC y PSOE para investir a Salvador Illa. El presidente aragonés, que es del PP, ha lamentado que el PSOE haya pactado la financiación para Catalunya "a cambio de votos" cuando hay comunidades autónomas que "tienen más necesidades"; ha puesto como ejemplo su autonomía.

Azcón ha presumido durante su rueda de prensa posterior a la reunión con Sánchez de presumir una comunidad que "experimenta un desarrollo económico superior" al resto. Ahora bien, ha lamentado que por culpa de la despoblación su comunidad reciba 81 millones de euros menos de financiación en 2025, un hecho "injusto". Por otra parte, el presidente de Aragón ha seguido el guion de Génova 13 y ha recordado que la reforma del sistema de financiación "afecta a todos los españoles", de manera que se tiene que discutir de forma multilateral tanto en la Conferencia de Presidentes como en el Consejo de Política a Fiscal y Financiera, donde están representados todos los gobiernos autonómicos y el Gobierno.

La reunión de Azcón con Sánchez ha llegado una semana después de que pasara por el despacho del presidente del Gobierno su homólogo castellanomanchego, Emiliano García-Page, que en su comparecencia ante los medios de comunicación defendió seguir expoliando a los catalanes. El barón socialista expuso su absoluto rechazo a "la inadmisible" financiación singular pactada entre PSOE y Esquerra Republicana. "La riqueza de Catalunya es de todos", dijo en un discurso en que se refirió a Castilla-La Mancha como un territorio "pobre" que tiene que recibir recursos de parte de aquellas comunidades "ricas".

Page, siempre crítico con Pedro Sánchez, se diferenció de lo que propone el presidente del Gobierno, y rechazó que el pacto ERC-PSOE sea la base de una negociación multilateral con las comunidades autónomas para pactar un nuevo modelo del régimen común. "No doy por válido el documento planteado con los independentistas; se tiene que hablar sobre el documento actual, el pacto actual, y sobre la realidad de hoy," sentenció.

Page no quiso revelar qué habló con Pedro Sánchez dentro del palacio de la Moncloa, pero sí que reconoció que se fue de Madrid "teniendo claro que el documento de ERC es un concierto". "Es un cupo elemental y las cosas hace falta llamarlas por su nombre", manifestó el barón castellanomanchego después de su reunión con el presidente del Gobierno en el palacio de la Moncloa.