La cúpula de Podemos recibió la primera denuncia contra Juan Carlos Monedero por acoso sexual en 2016, cuando una militante del partido informó de que había vivido "un episodio grave" con Monedero. Una segunda mujer estaba implicada en el episodio, que se produjo después de un acto del partido a Catalunya. Solo dos años después de la fundación del partido, en aquel momento, no tenían un protocolo contra el acoso. La afectada explicó el caso a varias personas de Podemos y se trasladó al Área estatal de Igualdad, para después elevarlo a la cúpula del partido y pedir responsabilidades, según informa elDiario.es. La dirección de Podemos se comprometió a dar apoyo a las mujeres si presentaban una denuncia, pero no se abrió ninguna investigación interna ni se tomó ninguna medida contra Monedero. Una de las fuentes consultadas por el digital afirma que "eran acusaciones graves y, aunque la víctima no quería hacer nada concreto para no exponerse, su idea era que fuera el partido el que actuara, pero no se hizo nada".

Esta información llega después de que un excolaborador del canal de Pablo Iglesias revelara acusaciones de acoso sexual contra Monedero. Unas acusaciones de las cuales la dirección de Podemos tenía constancia, motivo por el que decidió apartarlo de los actos del partido, a pesar de que el expolítico lo niega. Las acusaciones contra Monedero no dejan de llegar, y este jueves se supo que la universidad Complutense de Madrid lo investiga a raíz de una denuncia de acoso sexual de una alumna.

Ninguna acción contra Monedero

Según relata el digital, la denuncia de este "episodio grave" llegó a finales de 2015, después de un acto público en Catalunya al cual asistió Monedero. La situación se produjo en una vivienda particular. En aquel momento, el expolítico no ocupaba ningún cargo orgánico en el partido después de su salida en abril del 2015. La mujer explicó la situación al menos a dos personas del partido, y una de ellas calificó el suceso de "grave" y lo trasladó al área estatal de Igualdad de Podemos, que estaba en manos de Clara Serra, quien comunicó el caso a Podemos. Las tres fuentes señalan que la situación se transmitió en la cúpula de Madrid con la intención que hiciera alguna cosa para evitar que la afectada se expusiera, que en todo momento dejó claro que no quería hacerlo porque tenía intención de quedarse al partido y temía quedar marcada por esta cuestión. Cuando el caso se trasladó a la dirección del partido se mantuvo el anonimato de la víctima.

La dirección de Podemos mostró su intención de darles apoyo si decidían denunciar, aunque ellas habían expresado que no lo querían hacer. Sin embargo, el partido no abrió ninguna investigación contra Monedero y dio órdenes para que el tema se quedara en el interior de la formación para evitar el ruido. Según relatan, la intención era que el partido apartara a Monedero y que asumiera que no era un caso aislado, que el problema del machismo era estructural y que requería acciones y documentos específicos. Con todo, Podemos no aprobó su protocolo contra el acoso hasta el 2018.

El secretario general de Podemos en aquel momento, Pablo Iglesias, ha asegurado en declaraciones en elDiario.es que nunca recibió ninguna queja de este tipo contra Monedero. "Nunca tuve conocimiento mientras fui secretario general de Podemos de ninguna denuncia de ninguna mujer en el partido contra Juan Carlos Monedero por ningún asunto derivado de su comportamiento sexual".