El Partido Popular catalán ha reclamado que la nueva comisión sobre el fascismo, el racismo y los discursos de odio acordada entre PSC, Junts per Catalunya, Esquerra Republicana, Comuns y la CUP "también revise y condene a los que saludan con el puño en alto", haciendo referencia a los saludos comunistas. Así lo ha reclamado el portavoz parlamentario de los populares, Juan Fernández, que lo ha comparado con cuando "vemos a un señor que supuestamente hace un saludo nazi", en referencia a Elon Musk. "Además de condenar a este señor, quizás también deberíamos condenar el comunismo", ha insistido el diputado en rueda de prensa desde la cámara.

Desde el Partido Popular todavía no han decidido si participarán en esta comisión, pero han puesto como condición que este órgano también fiscalice las declaraciones más polémicas de los partidos de izquierdas de la cámara catalana, haciendo claramente referencia a los Comuns y la CUP. El portavoz parlamentario del PPC ha reclamado "ser rigurosos y no frivolizar con el fascismo". En este punto, ha asegurado que, si hay que revisar la historia", se haga "de una forma amplia". Y ha añadido: "Porque el fascismo se tiene que revisar y condenar, evidentemente, como también hay que revisar y condenar el comunismo".

PSC, Junts, ERC, Comuns y CUP alertan sobre el incremento de discursos de odio

Los grupos parlamentarios proponentes —PSC, Junts per Catalunya, ERC, Comuns y CUP— alertan sobre un incremento de los discursos contra los derechos humanos que "ponen en riesgo la convivencia, la cohesión social y la democracia". A partir de aquí, la comisión recogerá información cualitativa y cuantitativa sobre estos fenómenos e identificará las políticas y los mecanismos más efectivos de respuesta social y política. También apuntan a que quieren saber los ámbitos donde se originan estos discursos, los canales por donde se emiten y los colectivos a quien van dirigidos. Paralelamente, la comisión impulsará un trabajo conjunto para "lograr un entorno libre, igualitario y respetuoso en todos los espacios y que promueva el respeto a los derechos humanos".

La Mesa tendrá que admitir a trámite la propuesta y, posteriormente, la Junta de portavoces será la encargada de decidir en qué pleno del Parlament se vota esta iniciativa. Para poder presentar esta propuesta, hacía falta una quinta parte de los diputados de la cámara o bien dos grupos parlamentarios. En este caso concreto, son cinco los grupos parlamentarios que la apoyan, de modo que, previsiblemente, se aprobará en el pleno.