El Gobierno español se someterá este miércoles en el Congreso de los Diputados a un nuevo examen sobre su estabilidad parlamentaria. Se votarán tres reales decretos y todavía es una incógnita si conseguirá convalidar o no el más importante de todos ellos: se trata de un decreto ómnibus que incluye una revalorización de las pensiones y del ingreso mínimo vital, así como ayudas a los usuarios del transporte público y a los afectados por la DANA valenciana. La Moncloa reclamaba este martes en rueda de prensa a PP y Junts que voten a favor. El PSOE apura su negociación con los independentistas para salvar este decreto: fuentes de alta jerarquía del Consejo de Ministros aseveran que las conversaciones entre socialistas y juntaires son "constantes" y la relación entre los dos "avanza". Por ahora, ninguna de las dos partes confirma que en las últimas horas se haya producido un encuentro en Ginebra o Bruselas como exigió Carles Puigdemont el viernes pasado. De todos modos, el medio Okdiario sí que informa de un encuentro en Waterloo. Mientras tanto, desde Ferraz recetan calma y reclaman "discreción en las negociaciones y transparencia en los acuerdos". Por su parte, fuentes de Junts citadas por el canal 324 niegan avances en los contactos con el PSOE en Bélgica y mantienen el ultimátum a los socialistas.

 

Preguntado en la rueda de prensa del Gobierno español de este martes sobre los contactos con Junts, el ministro Félix Bolaños ha recordado que como ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes tiene "la obligación de llegar a acuerdos" con los distintos grupos parlamentarios. "Por supuesto que hay conversaciones", ha añadido. De todos modos, el ejecutivo de Pedro Sánchez ya da por hecho que uno de los tres decretos caerá: es el del gravamen a las empresas energéticas, se prevé que Junts y PNV lo tumben. Y se espera que el PP sume sus votos a los del PSOE para convalidar la norma que permite compatibilizar el trabajo con la pensión de jubilación.

Fuera de cámara, con los micrófonos apagados, la sala de máquinas del Gobierno recuerda que el decreto que peligra es "transversal". Y advierte a Junts y PP que no tendrían que tumbarlo porque, según su opinión, es injustificable tumbar un decreto que incluye ayudas a los afectados por la DANA. Insisten en que sería difícil argumentar el voto en contra de la revalorización en un 2,8% de las pensiones contributivas en 2025, según el IPC, así como medidas de apoyo a los damnificados por el volcán de La Palma, rebajas al transporte público u otros como la prohibición de cortar los suministros públicos a personas vulnerables. El decreto saldría adelante si se reedita la mayoría de la investidura (eso incluye a Junts) o si el PP opta por la abstención. El laboratorio de Pedro Sánchez explica que, en caso de que las dos formaciones tumben este decreto ómnibus, será porque quieren "darse el gusto" de exponer la debilidad parlamentaria de los socialistas.

"Si se tiene que hablar el doble, lo haremos"

Otras fuentes del Gobierno español expresaban la semana pasada su voluntad de reconducir la relación entre el PSOE y Junts per Catalunya. "Si se tiene que hablar el doble, lo haremos", apuntaban desde el palacio de La Moncloa horas después de que Carles Puigdemont anunciara que Junts aparcaba cualquier negociación sectorial con el PSOE y que solo se abría a cerrar acuerdos en cuestiones como el catalán en Europa o la inmigración.

Estas mismas fuentes aseguran que "no se ha roto nada", pero admiten que rehacer los puentes es un "ejercicio de responsabilidad" para mantener viva la legislatura. Sea como sea, la receta del ejecutivo de PSOE y Sumar para apagar las llamas del incendio se ha limitado a apelar a un diálogo entre ambas formaciones que ha sido hasta ahora estéril: las dos partes se reúnen mensualmente en Suiza tal como se acordó hace un año y medio, pero los independentistas están descontentos con la ausencia de resultados de estos encuentros.