PSOE y BNG ya han firmado el acuerdo entre las dos partes para que el único diputado que tiene la formación nacionalista gallega en el Congreso de los Diputados, Néstor Rego, dé su 'Sí' a la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. El pacto ha sido firmado entre la número dos del PSOE y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y la portavoz del BNG, Ana Pontón, en la cámara baja. El voto afirmativo del diputado gallego, imprescindible en una aritmética ajustadísima después del resultado de las elecciones del 23-J, se traducirá en la condonación de parte de la deuda gallega con el Estado, y con descuentos en dos autopistas de Galicia. Concretamente, se incluyen nuevas rebajas de peajes para la AP-9, que ahora tiene bonificado el viaje de vuelta en menos de 24 horas si se utiliza telepeaje; y para el AP-53, que une Santiago con Ourense por el tramo que tiene peaje directo a los usuarios. "Este gobierno tendrá una repercusión directa en la vida de los gallegos", ha afirmado Pontón en declaraciones posteriores a la firma del acuerdo.

 

 

En este acuerdo, las dos partes han acordado impulsar "las reformas precisas para adecuar la estructura del Estado al reconocimiento de los sentimientos nacionales de pertenencia", y aboga por garantizar en Galicia el mismo estatus que Catalunya y Euskadi. PSOE y BNG también han encajado las manos por tal "de avanzar en el refuerzo de la capacidad de decisión del autogobierno gallego, mediante la propuesta de una convocatoria antes de que acabe 2023 de la Comisión Mixta de Transferencias Estado-Xunta de Galicia, para programar, a lo largo de la presente legislatura, la activación de la transferencia de la totalidad de las competencias recogidas en el Estatuto de Autonomía de Galicia, así como de las competencias que habían sido objeto de consenso en el Parlamento de Galicia".

Paralelamente, las dos formaciones han acordado "realizar un estudio para la implementación de Rodalies en Galicia, teniendo en cuenta las necesidades de la infraestructura, el material móvil y la disponibilidad de personal, para que, antes del final de la legislatura, Galicia disponga de servicio de Rodalies, priorizando el tramo Vigo-Pontevedra o A Coruña-Ferrol".

El acuerdo entre socialistas y nacionalistas gallegos llega después de que Pontón llegara a amenazar con una abstención del BNG en la investidura de Sánchez, en lugar de un voto afirmativo. El Movemento Arredista hizo público hace unos días un comunicado en el que defendió la postura de "no dar apoyo" a la investidura de Sánchez por muchos de los "incumplimientos" del PSOE con respecto a la mayor parte del acuerdo de la legislatura pasada.

El PSOE ya tiene el apoyo de EH Bildu y de ERC, de manera que falta acabar de cerrar el "" del PNV y Junts. Con respecto a los independentistas capitaneados por Carles Puigdemont, han enfriado la inminencia del acuerdo para la investidura. En Junts, las negociaciones continúan y se mantiene la exigencia sobre los "flecos" pendientes (referentes esencialmente a la ley de amnistía).