El PSOE ha descartado tocar la autodeterminación de género a la ley trans, pero todavía tiene dudas. Así lo han avanzado este jueves fuentes del grupo socialista tanto a Efe como a Europa Press, que hablan de preocupación en torno a la seguridad jurídica de la norma y la equiparación de la violencia de género con violencias que se registran en el colectivo LGTBIQ+. Esta presunta seguridad jurídica ha servido de excusa a los socialistas para retrasar la ley trans con la ampliación del plazo para presentar enmiendas al proyecto. Un retraso que ha hecho enfadar al colectivo LGTBIQ+, a Unidas Podemos, al Ministerio de Igualdad... y a la diputada Carla Antonelli, que ha abandonado el PSOE por este motivo.
El grupo socialista se ha escudado en el hecho de que la ampliación del plazo para presentar enmiendas al proyecto servirá para "dar seguridad jurídica a la ley", porque saben que el Partido Popular y la ultraderecha la recurrirán ante el Tribunal Constitucional. "El legislativo puede mejorar la ley y hacerla más robusta ante estos ataques de los que son verdaderos enemigos de los derechos de los colectivos", han subrayado las fuentes.
"Ningún retroceso" en la ley trans
A pesar de la excusa, los socialistas han querido dejar claro que descartan tocar la autodeterminación de género en las enmiendas a la ley trans. Es uno de los principales ejes del proyecto, el derecho a cambiar de sexo sin informes médicos. Así, la norma despatologiza a las personas trans y establece que el cambio de sexo registral se podrá hacer a partir de los 12 años: entre los 12 y los 14 años se requerirá aprobación judicial; entre los 14 y los 16, la asistencia de padres o tutores; y a partir de los 16 no habrá ninguna limitación. Pero el PSOE todavía tiene dudas, tanto con la mencionada seguridad jurídica como con la equiparación de la violencia de género a las violencias que se registran en el colectivo LGTBIQ+. El artículo 65 del proyecto de ley contempla que cuando haya una condena o una orden de protección por violencia familiar LGTB-fóbica o intragénero, las víctimas tendrán los mismos derechos laborales y de Seguridad Social que se atribuyen a las víctimas de violencia de género.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha asegurado que no permitirá "ningún retroceso" respecto de lo que se había pactado en el proyecto de ley trans. Además, ha reconocido que vive con "muchísima preocupación" el retraso en la tramitación de la norma y las posibles enmiendas que cuestionarán aspectos centrales del texto. "Supone poner en riesgo que pueda ser aprobada antes de finales de año", ha lamentado este jueves en una entrevista en TVE. En cambio, los socialistas han respondido a Montero y han dicho que la mayoría de las leyes se enmiendan en periodo de trámite parlamentario. Pero también han reconocido que es fácil que la ley trans salga adelante y han criticado la existencia de voces interesadas en incitar la confrontación, a la vez que han admitido un debate interno en el PSOE sobre la legislación.