El PSOE ha solicitado en la Audiencia Nacional poder presentarse como acusación popular en los dos casos en que se investiga a Víctor de Aldama: el caso Koldo y el caso de los hidrocarburos. El empresario se encontraba encarcelado por esta segunda trama corrupta, y la semana pasada fue puesto en libertad después de que, en su declaración ante el juez que investiga la otra trama, empezara a incriminar a altos cargos del PSOE en el caso Koldo. "Nos encontramos ante causas de interés nacional, en las que los graves hechos investigados podrían ser constitutivos de delitos públicos," apuntan fuentes del PSOE, que señalan que toman esta decisión a causa de la "preocupación y alarma social generada". Aseguran, también, actuar en "representación de sus afiliados". El viernes de la semana pasada, el PSOE presentó una querella conjunta por injurias y calumnias contra Víctor de Aldama por sus acusaciones contra Pedro Sánchez, María Jesús Montero, Carlos Moreno (jefe de gabinete de la vicepresidenta primera), Santos Cerdán, Ángel Víctor Torres y Salvador Illa.

Concretamente, Aldama apuntó directamente a Pedro Sánchez, aseguró que el presidente español tenía apuntado en la agenda una cena con Delcy Rodríguez (vicepresidenta de Venezuela), aseguró que Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García recibieron sobres de dinero y mencionó reuniones con Teresa Ribera. Después de su declaración, el máximo líder de los socialistas cargó contra sus "inventos y mentiras", José Luis Ábalos negó las acusaciones "difamatorias y falsas" y el PSOE anunció acciones legales contra él. A última hora, el juez lo dejó en libertad después de que la Fiscalía Anticorrupción informara a favor de su salida de la prisión con medidas cautelares como la retirada del pasaporte. "Que no se preocupe el señor Sánchez, que tendrá pruebas de todo lo que se ha dicho", afirmó ante los medios de comunicación.

Una de las principales revelaciones de Víctor de Aldama en su relato fue en relación con la foto entre él y Pedro Sánchez en un acto del PSOE de Madrid celebrado en febrero de 2019 que publicó El Mundo hace un mes. El empresario señaló que la foto no fue "fortuita", sino que el presidente español le quiso agradecer unas gestiones que había hecho en México en relación con la licitación de contratos de obras ferroviarias. Según su relato, el líder socialista le dijo que lo tenían "informado" de sus actuaciones: «Gracias por lo que está haciendo, me tienen informado», le habría dicho. "A mí me hacen ir a un acto del PSOE para hablar con el presidente porque el presidente quería conocerme y hablar conmigo", relató Aldama en su declaración. Puedes hacer click aquí para leer el resto de acusaciones del comisionista a los socialistas.

El jueves, horas más tarde que Víctor de Aldama declarara ante el juez, Pedro Sánchez hizo lo mismo ante los periodistas, y aseguró estar "tranquilo". El presidente del Gobierno se refirió al empresario como "personaje" y como "presunto delincuente" que utiliza los "inventos" y las "mentiras" como estrategia de defensa. "Somos un gobierno limpio que surgió de una moción de censura para poner fin a la corrupción", reivindicó el jefe del ejecutivo español, que también aseguró que "cualquier sospecha de corrupción tiene que ser extirpada de raíz". El caso es que horas más tarde, cuando Aldama fue liberado y salió de prisión, amenazó a Pedro Sánchez: "Si quiere pruebas, las tendrá", declaró ante la prensa.