PSOE y Junts han mantenido una nueva reunión de negociación en Suiza, después del ultimátum que el lunes lanzó desde Bruselas el president en el exilio, Carles Puigdemont. En el encuentro, que se ha celebrado este viernes, ha participado Puigdemont, además del secretario general de Junts, Jordi Turull, la vicepresidenta del partido Míriam Nogueras, y el director de la Oficina del president, Josep Lluís Alay. Por parte socialista estaba el secretario de organización, Santos Cerdà, y su número dos, Juan Francisco Serrano. Fuentes del PSOE han señalado que se trataba de una reunión más de las que han celebrado las delegaciones de los dos partidos, las cuales describen como "negociaciones discretas y acuerdos transparentes".
El encuentro, que ha avanzado ElPeriódico y ha confirmado ElNacional.cat, se produce cuatro días antes de que la mesa del Congreso tenga que decidir sobre la tramitación de la proposición de ley que ha presentado Junts reclamando al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se someta a una cuestión de confianza. Esta iniciativa se presentó después de que Junts ha constatado que los acuerdos con el PSOE no dan resultados, por lo cual, Puigdemont reclamó o bien "un punto de inflexión o bien dejarlo correr". Fuentes del Congreso ya han apuntado que los letrados de la Cámara rechazarán la iniciativa porque el simple debate de la proposición sería como una "cuestión de confianza encubierta".
Escepticismo
La reunión de este viernes es la última que había prevista en Suiza y se tenía que haber celebrado el mes de noviembre, pero se aplazó por la crisis provocada por la DANA y por los procesos congresuales que ha tenido que superar tanto Junts como el PSOE.
Puigdemont, que el lunes aseguró que todas las reuniones con el mediador se han celebrado de manera puntual, adelantó durante la rueda de prensa en Bruselas que, a pesar de su ultimátum, este último encuentro también se celebraría. No obstante, no escondió el escepticismo sobre los resultados ante de lo que describió como "la descoordinación entre lo que se aborda a Suiza y la praxis del Gobierno, que es muy preocupante".
A pesar del silencio con que se rodean habitualmente estas reuniones, la información que ha trascendido de esta última convocatoria indica que las sospechas del político independentista se han confirmado y el encuentro se ha cerrado sin conseguir avances.
La principal preocupación del PSOE ahora mismo es conseguir el apoyo de Junts para sacar adelante los presupuestos del Estado. No obstante, después de plantear el lunes su ultimátum al PSOE, y ante la incredulidad que ha mostrado la Moncloa sobre la advertencia de Puigdemont, Nogueras insistió a Sánchez el miércoles en el Congreso durante la sesión de control al Gobierno que tenía que "mover el culo" si tenía intención de negociar con su grupo los presupuestos.
Puigdemont reclama como condición imprescindible para apoyar las cuentas del Estado que se compense a Catalunya por los reiterados incumplimientos presupuestarios que se registran año tras año en la ejecución de las inversiones previstas, y que se materialicen los traspasos comprometidos, entre los cuales los de las competencias de inmigración, además de cumplir con el compromiso de impulsar la oficialidad del catalán en Europa.