Las votaciones en el Congreso de los Diputados siguen poniendo en riesgo la estabilidad del Gobierno. El PSOE se ha tenido que alinear este martes con el PP para evitar un nuevo revés parlamentario. Los socialistas han votado a favor de una proposición de ley impulsada por los populares que tiene el objetivo de que el presidente español tenga que comparecer más en la cámara baja para dar explicaciones sobre la política exterior de la Moncloa. A primera hora de la tarde, en la Carrera de San Jerónimo no estaba claro cuál sería el posicionamiento del PSOE, pero fuentes socialistas confirmaban poco después de la intervención de su diputado que el voto sería afirmativo. Durante el debate, los socios de investidura de Sánchez han anunciado que facilitarían que la proposición de ley superara su primer examen parlamentario y el PSOE se ha visto abocado a apoyar una iniciativa que tiene una exposición de motivos altamente crítica con las “decisiones tomadas unilateralmente” por Sánchez y con los “estragos” y la poca “certeza” que aportan las diferencias entre el PSOE y Sumar. La proposición de ley se ha tomado en consideración por 302 votos a favor, 24 en contra y 14 abstenciones. Sumar se ha opuesto y Bildu, PNV y Podemos se han abstenido.

El objetivo de la iniciativa, que modifica la Ley de la Acción y del Servicio Exterior del Estado, es forzar que el presidente del Gobierno comparezca en las Cortes Generales “con carácter previo a los Consejos Europeos para informar sobre las posiciones que tomará en el orden del día previsto” y, además, establecer que, “ante cualquier decisión de política exterior que suponga un cambio con respecto a cuestiones contempladas a la Estrategia de Acción Exterior”, el presidente español “tendrá que comparecer con carácter previo para informarlo” y explicar “las razones que le llevan” a esto. El encargado de defender la iniciativa en nombre del PP ha sido Esteban González Pons, que ha subrayado la necesidad de que el Congreso “no renuncie a su competencia en política exterior” y ha situado a los diputados en una disyuntiva: “Que esta cámara sea un parlamento digno y autónomo o la mera sucursal del Palacio de la Moncloa”.

Durante su intervención, el diputado socialista Sergio Gutiérrez, que no ha anticipado el sentido del voto del PSOE, ha abanderado el “protagonismo”, el “liderazgo” y el “respeto” de Sánchez en materia de política exterior. “Entiendo que no les guste, pero de aquí a negarle potestades constitucionales hay una diferencia notable”, ha apuntado. El socialista ha reprochado a los populares que “se vistan con piel de cordero democrático” cuando fueron los que, en su momento, “enviaron tropas a la guerra ilegal de Iraq sin pasar” por el Congreso. “Es llamativo que pidan más debates cuándo nunca se refieren a la cuestión concreta por la que se convocan los debates, estamos muy a gusto debatiendo porque cuanto más debates, más se desenmascaran”.

Sumar abre una nueva brecha en el seno del Gobierno

Uno de los discursos más críticos ha sido el de Agustín Santos, diputado de Sumar, que ha acusado el PP de querer “arrogarse” un “derecho de tutela” y un “veto anticonstitucional” sobre la política exterior y pretender “resucitar de las cenizas un bipartidismo en política exterior que murió en el 2004”. Sumar, a diferencia del PSOE, ha votado en contra de la iniciativa. Santos ha apostado por “establecer una barrera que bloquee el avance del PP y Vox” y ha lamentado que los populares quieran “bloquear la acción del Gobierno” en el exterior e intenten “enviar al presidente del Gobierno ligado de pies y manos para que sea víctima de las mayorías conservadoras y reaccionarias de la Unión Europea”.

ERC y Junts ponen de relieve que se refuerza el control parlamentario

Por su parte, los partidos independentistas se han abierto a estudiar la propuesta del PP, pero han reprochado los intereses partidistas de los populares. Esquerra ha justificado su voto a favor esgrimiendo que la principal “virtud” de la proposición de ley es que permite “aumentar” el control parlamentario, dado que si las decisiones en política exterior “no pasan el proceso de escrutinio de la cámara” son “débiles y discutibles”. “Sin el control del parlamento, está hay el peligro de la arbitrariedad”, ha avisado el diputado Francesc Marc-Álvaro, que ha añadido que la intervención del Congreso es una garantía extra de “coherencia y estabilidad” en las decisiones y ha puesto de relieve la “unanimidad” por el “déficit de presencia” del presidente español al pleno para hablar de cuestiones de política exterior. “La responsabilidad política incluye explicar la trazabilidad de las cosas, del porqué de cada decisión y aceptar que esta trazabilidad, si no se ofrece como tal, se convierte en un misterio”, ha concluido, en referencia al giro de Pedro Sánchez sobre el Sáhara Occidental, que todavía es un “enigma”.

Desde Junts per Catalunya, Josep Maria Cruset ha reprochado el “menosprecio” de Sánchez a la “rendición de cuentas” al Congreso cuando se trata de explicar la política exterior y ha lamentado que vaya a dar explicaciones “cuando han pasado semanas” desde la celebración del Consejo Europeo y cuando “el día a día ha cambiado significativamente la realidad de la política exterior”. El diputado juntaire ha censurado la “falta de transparencia” y ha reprobado que “históricamente” la acción exterior del Gobierno se haya “instrumentalizado” para ir “en contra de los catalanes y sus legítimas reivindicaciones”. También ha avisado que Junts pondrá sobre la mesa otras cuestiones vinculadas en la acción exterior de la Generalitat y la “persecución que ha sufrido y que hay que revertir”.