El PSOE permitirá con su voto, como ya hizo la pasada legislatura, que el Congreso de los Diputados inicie la tramitación de una proposición de ley que pretende despenalizar, entre otras cuestiones, los delitos contra la Corona, el enaltecimiento del terrorismo y los ultrajes a España. Es una iniciativa legislativa que presentó Sumar y que se debatirá este martes en el Congreso. La Cámara Baja votará su toma en consideración, es decir, si está de acuerdo en estudiarla.
Así lo ha adelantado en rueda de prensa el portavoz socialista en el Congreso, Patxi López, que ha justificado que el PSOE facilitará que la proposición de ley supere su primer examen parlamentario porque es necesario "un debate serio, profundo y esclarecedor" sobre la libertad de expresión. "Es bueno fijar el contenido inviolable de esta libertad, pero también los límites, ya que no hay libertad en democracia que no tenga límites", ha reflexionado López.
En desacuerdo en algunos puntos
Asimismo, el portavoz del PSOE ha reconocido que los socialistas no comparten "algunos contenidos concretos que aparecen en la propuesta" y ha apuntado que el propio debate durante la tramitación parlamentaria será enriquecedor y, entre todos, serán capaces de "marcar los límites".
Desde su óptica estrictamente personal, según él mismo ha señalado, Patxi López considera, por ejemplo, que "enaltecer el terrorismo es un límite". Y ha añadido que "algunos quieren prohibir cierto tipo de manifestaciones y exaltaciones, pero defienden otras que son del mismo carácter, pero de signo contrario". "Todo el mundo ve la paja en el ojo ajeno, pero nadie ve la viga en el propio", ha proclamado.
Delitos contra la Corona, enaltecimiento del terrorismo y ultrajes a España
Con la proposición de ley que se debatirá este martes en el Congreso, Sumar aspira a derogar, concretamente, seis preceptos del Código Penal, referentes a los delitos contra la Corona (el 490.3 y el 491), el enaltecimiento del terrorismo (el 578), los ultrajes a España, a las comunidades autónomas y a sus símbolos y emblemas (el 543), las injurias en el Gobierno, al CGPJ, al TC, al Tribunal Supremo, a los gobiernos autonómicos, al ejército y a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (el 504) y contra los sentimientos religiosos o de escarnio público (el 525).
La iniciativa también quiere poner punto final a las identificaciones colectivas en manifestaciones: introduce la pena de inhabilitación especial de uno a cuatro años y multa de seis a doce meses para los policías que identifiquen a una o varias personas con el objetivo, entre otros, de "conocer o controlar su participación en actividades de carácter político o sindical".
Tres precedentes la pasada legislatura
Esta proposición de ley sigue el camino de dos iniciativas que también pasaron el primer examen parlamentario la pasada legislatura. La más parecida es la que presentó Unidas Podemos en febrero del 2021 y que proponía derogar los mismos artículos. La iniciativa se tomó en consideración en junio del 2021 y superó el debate de totalidad en septiembre del 2021, en los dos casos con la oposición del PP, Vox y Ciudadanos. Sin embargo, quedó aparcada en un cajón y decayó cuando Sánchez adelantó las elecciones generales al 23 de julio.
Asimismo, Esquerra y Bildu impulsaron en mayo del 2022 una iniciativa en el Senado en la misma línea, pero que se circunscribía a despenalizar las injurias en la Corona y los ultrajes a España. En aquella ocasión, el PSOE también se mostró favorable. La proposición de ley se envió al Congreso, que en septiembre del 2022 rechazó las enmiendas de totalidad del PP, Vox y Ciudadanos, pero el texto quedó atascado, nunca se llegó a debatir en comisión y también acabó decayendo por la disolución de las Cortes.
Previamente, Esquerra Republicana había llevado el mismo texto en solitario al Congreso en octubre del 2020. Ahora bien, entonces el PSOE se alineó con el PP, Ciudadanos y Vox y votó en contra porque no era "el momento" de abrir un debate que solo distraería de las prioridades reales derivadas de la pandemia, según argumentó Isaura Leal.
ERC ya había intentado despenalizar las injurias en la Corona en anteriores legislaturas: en marzo del 2018 con otra iniciativa legislativa y en diciembre del 2016 con una proposición no de ley (que no tiene carácter vinculante). En los dos casos, el PSOE se negó a ello junto con el PP y Ciudadanos (Vox todavía no había entrado en el Congreso).