El presidente de la Generalitat en el exilio, Carles Puigdemont, ha reivindicado este 27 de octubre que la declaración unilateral de independencia del 2017 continúa vigente después de cinco años. En un mensaje en vídeo, Puigdemont se dirige a "todos los actores políticos" que hicieron posible aquella declaración después del referéndum del 1-O y les pide que hay que reunirse de nuevo para hacer balance y ver "si la vía de disolución del conflicto" ha proporcionado avances que "son vitales para el país". "Tenemos que ver si la dependencia ha abierto esperanzas por el futuro", ha afirmado.

Puigdemont reitera que la no aplicación inmediata de la DUI "no anula su vigencia" y "obliga a buscar la manera de desplegarla desde las instituciones autonómicas o republicanas". El presidente en el exilio defiende que "es una vía que no se ha intentado y por la cual obtuvimos hace cinco años el apoyo del Parlamento". En opinión de Puigdemont, este es "el único camino realista para culminar la independencia de nuestra nación".

Puigdemont ha valorado la declaración, que él mismo dejó suspendida para abrir un período de diálogo con el estado español, y ha defendido que se aprobó "en una votación que hicimos a conciencia", mientras el gobierno español perpetraba "un golpe de estado para disolver el Parlament" y destituir al Gobierno de Catalunya con la aplicación del 155. La aplicación de ese artículo "buscaba la parálisis del país, perjudicar a todos los ciudadanos" porque era "un castigo y escarmiento general". "Sabíamos lo que votamos, los que participamos en la votación y la minoría monárquica que no participó hizo evidente que la única forma que tenía parea impedir lo que se hacía era por medios no democráticos", ha añadido.

Hace cinco años, recuerda Puigdemont, se temía la reacción del Estado y la "dureza de la represión". El presidente en el exilio explica que hasta el último momento" hizo todo lo posible para que todo el mundo "fuese consciente" y ha remarcado que uno de los objetivos de las decisiones tomadas fue precisamente "garantizar la paz y la convivencia" porque es lo que permitió llegar hasta el 1-O.

Puigdemont descarta que el diálogo con España sea posible

Puigdemont aprovecha el aniversario de la DUI para insistir en el hecho que el diálogo con el estado español no es posible y que, en consecuencia, la última opción es la que hasta el momento no se ha acabado de explorar. "El Procés solo acabará cuando Catalunya sea reconocida como estado independiente", ha subrayado el presidente en el exilio, justamente en un momento en el que son muchas las voces que proclaman que el Proceso ha muerto.

La desconfianza de Puigdemont con el estado español y esto la puerta a considerar que “un acuerdo con el Estado basado en principios democráticos no es practicable”. De hecho, Puigdemont considera que el presidente “nos lo acredita” y por eso dice que “no hay que coleccionar más frustraciones confiando en palabras” porque España “hace de la mentira la única política de relación con Cataluña”. La salida de algunos líderes hacia el exilio respondía a la necesidad de “recorrer la vía más incierta y arriesgada”. Puigdemont defiende el exilio como el valedor de la *DUI y responsable de plantear una respuesta democrática en el estado español lejos de la “represión arbitraria”. “Teníamos que poder internacionalizar el conflicto”, ha destacado Puigdemont.

La posición de otras fuerzas independentistas

Sobre la posición otras fuerzas independentistas, Puigdemont comenta que hay que han trabajado porque se produjera una “división interna” del movimiento independentista para hacer olvidar la DUI y en este sentido, asegura, hay “determinados sectores que han actuado con más eficacia que la represión del Estado”. A pesar de que el movimiento independentista hizo posible la DUI el 2017, desde entonces no se ha reactivado. Puigdemont ha destacado que cinco años después no se ha hecho ningún paso para anular la suspensión que él mismo promovió ni tampoco se ha revocado la declaración. En paralelo, el exilio ha preservado “la legitimidad del Parlamento” que tomó aquella decisión. Para Puigdemont, el Procés “no puede prescindir” de la DUI porque actualmente hay más razones para defender la independencia.