El president en el exilio, Carles Puigdemont, ha anunciado a través de un vídeo que ha emprendido el viaje de regreso del exilio para acudir al pleno de investidura que se celebrará este jueves en el Parlament y que lo hace a pesar del riesgo de ser detenido para denunciar "la actitud de rebelión en la que se han bunquerizado algunos jueces del Supremo". Puigdemont estará el jueves en Barcelona para participar en la investidura del primer secretario del PSC, Salvador Illa, como president de la Generalitat, con los votos de los diputados de ERC y los comuns, y los Mossos han recibido la orden de no permitir que acceda a la cámara catalana. El Consell de la República y entidades independentistas han convocado un acto a las 9 de la mañana en el paseo de Lluís Companys para acompañar a Puigdemont hasta el Parlament.
🔴 Retorno de Puigdemont para la investidura de Salvador Illa, DIRECTO
A través de un vídeo, Puigdemont recuerda que ni él ni el también diputado en el exilio Lluís Puig se encuentran "en condiciones de normalidad democrática" y no podrán asistir libremente al pleno, porque están siendo perseguidos por haber permitido que los catalanes votaran en referéndum el 1-O, y porque el Tribunal Supremo se niega a obedecer la ley de amnistía "aprobada y en vigor y que es de obligada aplicación".
Viaje de retorno
"Este desafío se tiene que contestar y se tiene que confrontar, por eso he emprendido el viaje de retorno del exilio, convencido de que no hay otro camino para la normalidad democrática que el fin de la represión política, que está contemplada en la letra y el espíritu de la ley de amnistía," subraya.
Admite que esta situación no parece preocupar al gobierno de Pedro Sánchez ni al futuro Govern de la Generalitat, pero subraya que hay muchos catalanes que quieren un sistema democrático pleno y quieren disfrutar de lo mismo que los países y sociedades más democráticas del mundo, entre otras cosas "una justicia imparcial, que no tenga agenda política, que no interfiera para impedir la voluntad popular que se expresa siempre a través de los parlamentos."
Lamenta que debería ser normal que pudiera acudir al pleno, y que el hecho de tener que arriesgarse a una detención —que tacha de arbitraria e ilegal— evidencia la anormalidad democrática que deben combatir. "No porque seamos independentistas sino porque somos demócratas", concluye.
El juez instructor del Supremo, Pablo Llarena, se ha negado a aplicar la amnistía a Puigdemont y Lluís Puig y mantiene las órdenes de detención contra ellos argumentando que la celebración del referéndum comportó un enriquecimiento personal de carácter patrimonial, lo cual se sitúa entre las excepciones del delito de malversación que incluye la ley de amnistía.