La embestida del ministro de Exteriores, Sergei Lavrov, contra el responsable de la diplomacia europea, Josep Borrell, esta mañana en Moscú ha aparecido unas horas más tarde en el mitin de JxCat en Figueres. "Me sabe mal Josep Borrell, pero cada vez que vayas por el mundo intentando dar lecciones, habrá alguien que se acordará de lo que tu gobierno, tu partido político y tu habéis hecho", ha advertido al cabeza de lista de JxCat, Carles Puigdemont.
El presidente de JxCat se refería a la situación que se ha producido en el marco de una rueda de prensa conjunta cuando en respuesta a los llamamientos de Borrell a liberar al líder opositor Aleixei Navalni, el ministro de Exteriores ruso ha denunciado los casos de abusos policiales vividos recientemente en Europa y en los Estados Unidos y se ha referido a la situación de los presos políticos catalanes.
Puigdemont ha advertido a Borrell que siempre alguien le recordará que pegaron a "personas inocentes y pacíficas, personas mayores y jóvenes, que sólo querían votar"; que han destituido a un gobierno elegido democráticamente; convocado "elecciones a conveniencia"; encarcelado a líderes políticos y perseguido a "miles de ciudadanos que sólo querían votar". "Cada vez que vayas por el mundo intentando dar lecciones en nombre de la UE alguien te lo recordará", ha advertido.
"La vergüenza mayor"
El cabeza de lista de Junts ha pronosticado que "Josep Borrell acaba de pasar una de las vergüenzas mayores que un diplomático pueda pasar y ha hecho pasar vergüenza a la UE, cuando ha pretendido dar lecciones a los demás." "Lo triste es que tendremos las consecuencias en el proyecto de la UE, el espacio mayor que hay en el mundo de democracia y de derechos", ha asegurado a pesar de denunciar que España se sitúa al nivel de estados que no son de la UE que violan derechos fundamentales.
Recorriendo el hilo de esta cuestión, ha atribuido el llamamiento del candidato del PSC, Salvador Illa, a pasar página del procés a qué no les gusta todo lo que ha pasado. "Aquello iba de democracia. Y habéis visto que cuando oyen la palabra democracia es como los ajos con vampiros", ha ironizado Puigdemont, antes de acabar su intervención llamando a conseguir una "triple victoria" el 14-F, del independentismo, con más del 50% de votos y con JxCat en primer lugar.
Borràs, contra Calvo
La presidenciable, Laura Borràs, ha protagonizado también una intervención contundente, en este caso cargando contra la vicepresidenta Carmen Calvo que ha responsabilizando al independentismo de haber olvidado a las mujeres de Catalunya y haber antepuesto el procés a problemáticas como la violencia machista o la prostitución.
"Mire si somos feministas que estamos trabajando para que una mujer sea presidenta de la Generalitat por primera vez. La mejor política de igualdad es conseguir a una presidenta de la Generalitat", ha replicado Borràs que, al igual que había hecho momentos antes la cabeza de lista por Girona, Gemma Geis, ha acusado a Calvo de "banalizar la lucha contra la violencia machista" y hacerlo con "declaraciones electoralistas y vacías".
Apoyo de la ultraderecha
Borràs ha aprovechado la acusación de "trasnochadas" que la vicepresidenta del Gobierno ha dedicado a las ideas independentistas, para replicado que lo que de verdad es "trasnochado" y "con olor de naftalina" es recurrir a los votos de los fascistas para sacar adelante iniciativas en el Congreso, como ha hecho Pedro Sánchez dos veces la última semana, o tener un candidato a la Generalitat que todavía no ha rechazado los votos que le ha ofrecido Vox para ser investido.
También las acusaciones socialistas en el sentido de que el Gobierno ha usado TV3 como instrumento de agitación independentista han tenido su réplica. Ha acusado el candidato socialista, Salvador a Illa, de querer "poner las garras" en TV3 y que dejara de ser la televisión más vista. Borràs ha anunciado que pedirá la reapertura de la delegación de Perpinyà, además de reforzar las delegaciones del País Valencià y las Islas "porque nuestro marco lingüístico es el de los Països Catalans".
Borràs ha acusado a los socialistas de utilizar el CIS, que ayer publicó una segunda encuesta sobre las elecciones, para demostrar que el efecto Illa no se desinfla. "Ya está bien señor Illa de utilizar el CIS para hacerle trajes a medida. Que esta gente nos hable de agitación y propaganda da un poco de vergüenza ajena", ha remachado.
Las críticas por la proximidad a la ultraderecha también han ido dirigidas al comunes. Borràs ha reprochado el apoyo de Manuel Valls al Ayuntamiento de Barcelona, asegurado de que ella de este concejal sólo recibe querellas. "Hoy he sabido por la prensa que Manuel Valls se ha querellado contra mí por haberle recordado los hechos por los cuales fue condenado por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Ponga las querellas que quiera que no me callará lo que es una realidad: Usted deportó personas".