Como ya pasó hace cinco años, Toni Comín no cuenta con escaño, a pesar de haber sido escogido a las elecciones europeas. Eso se debe a la decisión de la presidenta de Cambra (y candidato a repetir el cargo), Roberta Metsola, quien ha rechazado reconocer su escaño por no haber prometido la Constitución española. En la anterior legislatura, los eurodiputados exiliados sufrieron lo mismo y la justicia reconoció que tenían derecho a su escaño. La defensa de Comín trabaja para volver a ganar el escaño del juntaire ante la justicia, sin embargo, no estará presente en la constitución de la nueva Eurocámara. En este contexto, Carles Puigdemont ha denunciado a través de las redes que la Eurocámara empieza una segunda legislatura violando los derechos fundamentales y señala como culpable al Estado español.

"Es la segunda legislatura consecutiva en la que la cámara nos viola derechos fundamentales, y lo hace de manera consciente, despreciando las decisiones previas y, sobre todo, despreciando a los ciudadanos", ha remarcado Puigdemont en una publicación en Twitter (ahora X). "La democracia asimétrica, que para unos es completa y para otros es restringida, no es democracia. Y eso tiene un culpable: el Estado español", ha señalado. Puigdemont ha sentenciado que "españolizar las instituciones europeas ha sido funesto". "Las consecuencias del estropicio son enormes, en términos de descrédito y de inseguridad jurídica", ha concluido.

Comín denuncia su situación

En una rueda de prensa el pasado lunes, Toni Comín cuestionó la legitimidad de Metsola a la hora de no permitirle acceder en su escaño. "¿Con qué legitimidad Metsola pedirá mañana la confianza de la cámara si la última decisión que habrá tomado antes de someter su candidatura a votación perjudica la democracia europea"?, preguntó. Comín sostuvo que con esta decisión quedan sin representación las 440.000 personas en que lo votaron. Además, el eurodiputado recordó que con esta decisión Metsola contradice a su predecesor socialista, David Sassoli.

El líder de Junts en la Eurocámara anunció que volverá a Bruselas y no participará en el pleno de este martes que empezará la nueva legislatura europea en Estrasburgo (Francia). "Volveremos para seguir trabajando y hacer lo que me corresponde como representante de mis electores, que es política, pero desde Bruselas, en la medida en que no tiene sentido permanecer en Estrasburgo sin poder participar en el pleno", explicó durante la rueda de prensa.