El president Carles Puigdemont ha salido a la carga en defensa de la líder de Junts en el Congreso de los Diputados, Míriam Nogueras, después de que esta haya sido llamada "la dóberman de Puigdemont" en un artículo del diario español derechista Vozpópuli. "En España no puedes cuestionar jueces, que todo el mundo sabe que son seres de luz infalibles, pero puedes calificar de perra a una diputada catalana y no pasa nada", ha afirmado, ofendido, el eurodiputado y líder de Junts, a través de un mensaje en la red social 'X' (Twitter).

"Los ataques que recibe Míriam Nogueras por hacer su trabajo son un síntoma más que indican que el sistema está podrido", ha valorado Puigdemont. La diputada de Junts últimamente ha sido objeto de críticas de la derecha española, política y judicial, por haber cargado desde el atril del Congreso contra los magistrados del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional encargados de juzgar cuestiones relativas al procés. Nogueras los tildó de personajes "oscuros" e "indecentes" que "retuercen la ley y los derechos" para perseguir el independentismo y que "serían cesados y juzgados inmediatamente" en un "país normalizado democráticamente".

Unas palabras dirigidas con pelos y señales al juez del juicio del procés, Manuel Marchena, al coronel de la Guardia Civil Daniel Baena, al teniente-coronel Diego Pérez de los Cobos, al juez Francisco Pérez de los Cobos, la expresidenta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, Concepción Espejel, el expresidente del CGPJ Carlos Lesmes, al juez de instrucción del juicio del procés, Pablo Llarena, y a la instructora del caso de Sandro Rosell, Carmen Lamela.

El poder judicial salta contra Nogueras

Ante estas palabras de la diputada de Junts, los jueces no tardaron en saltar. El presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Vicente Guilarte, amenazó a Nogueras con la "toma de medidas" contra "el señalamiento". "El señalamiento —y la finalidad que se desprende— a varios magistrados del Tribunal Supremo es inadmisible en un estado de derecho, uno de cuyos principios fundamentales es la separación de poderes. Las personas señaladas, así como cualquier otro miembro de la Carrera Judicial que pueda encontrarse en las mismas circunstancias, encontrarán en la institución que presido la más firme oposición a estos ataques en defensa de la labor jurisdiccional realizada por todos ellos, en los cuales manifiesto mi apoyo expreso y la garantía que, en el ejercicio de las competencias que la ley atribuye al CGPJ, se adoptarán las medidas necesarias previstas por el ordenamiento jurídico para proteger su independencia", apunta un comunicado difundido el miércoles por la cúpula del poder judicial.

Por su parte, el presidente del Tribunal Supremo, Francisco Marín Castán, lamenta el ataque "sin precedentes" de Míriam Nogueras. "No se corresponde con los requisitos mínimos de la separación de poderes en un Estado de derecho", afirmó. Además, nueve vocales del CGPJ, de la rama conservadora, reclaman un posicionamiento "claro y rotundo" que ponga fin a "el acoso y ruptura del estado de derecho". Son Wenceslao Olea, Carmen Llombart, José Antonio Ballestero, Francisco Gerardo Martínez-Tristán, Juan Manuel Fernández, Juan Martínez Moya, José María Macías, Nuria Díaz Abad y María Ángeles Carmona.