La primera reunión de Carles Puigdemont y Oriol Junqueras desde que ambos han recuperado las presidencias de Junts y ERC se ha cerrado con el acuerdo de "impulsar espacios de trabajo coordinados para debatir las cuestiones que afecten al futuro nacional" de Catalunya, con el objetivo de iniciar "una nueva etapa" en la relación entre ambos partidos que "contribuya a recuperar la fuerza y la iniciativa del movimiento independentista", según han afirmado en un comunicado conjunto. Puigdemont ha recibido a Junqueras en la Casa de la República, en Waterloo, donde sigue viviendo en el exilio a la espera de que se le aplique la ley de amnistía. En el encuentro han participado también sus números 2, Jordi Turull y Elisenda Alamany.
Antes de encontrarse con Puigdemont y Turull, Junqueras ha asegurado ante la prensa que su voluntad como presidente de ERC es "tener una relación fluida y educada con todo el mundo" y que esta sea "lo más productiva posible en beneficio de Catalunya y del conjunto de la sociedad". "Hablaremos con Junts, como con otra gente, con voluntad de construir los mejores acuerdos posibles para nuestro país”, ha concluido, antes de entrar en la Casa de la República. Junqueras recuperó la presidencia de ERC el 14 de diciembre y la reunión con Puigdemont es la primera que mantiene con un líder de otro partido político, tras reunirse con los grupos parlamentarios de Esquerra en las diferentes cámaras en las que tiene representación. Su último encuentro se produjo en circunstancias muy distintas: fue también en Waterloo, pero en ese momento, a finales de junio, ninguno de los dos presidía su partido.
En Madrid, el PSOE, pelotazo hacia adelante
Mientras los líderes de Junts y ERC estaban reunidos en la Casa de la República, en Madrid, el PSOE ha vuelto a chutar el balón hacia adelante y ha mantenido congelada la proposición no de ley de Junts que insta a Pedro Sánchez a someterse a una cuestión de confianza. La Mesa del Congreso de los Diputados —controlada por una mayoría conformada por socialistas y Sumar— ha decidido este jueves aplazar la decisión sobre si califica o no el texto de los independentistas, y ganar más tiempo para negociar con el partido de Carles Puigdemont. El órgano de gobierno de esta cámara volverá a evaluarlo en una nueva reunión, todavía sin fecha. Mañana está prevista en Bruselas una rueda de prensa del presidente de Junts, después de reunir al secretariado permanente del partido, para valorar la decisión de los socialistas. A su vez, Junqueras se había desmarcado de esta petición de cuestión de confianza, al considerar que "si no ayuda en nada, quizás no haga falta".