No han estado, pero Carles Puigdemont y Oriol Junqueras han sido los grandes protagonistas del debate de candidatos europeos de este martes por la noche en TV3. La televisión pública catalana lo tenía todo a punto para comunicar su plató con Soto del Real y Bruselas, y que de esta manera ambos pudieran participar, tal como inicialmente se había autorizado. Finalmente, sin embargo, no ha sido así. Y precisamente su ausencia les ha hecho absolutamente presentes.
A media tarde se ha sabido que se vetaba que Junqueras pudiera conectar a través de videoconferencia porque el horario no cuadraba con el funcionamiento habitual centro penitenciario. En aquel momento, Puigdemont se ha autoexcluido argumentando que no quería beneficiarse de una situación de desigualdad de su exsocio de Gobierno y ahora rival. Si a Junqueras no le dejaban, él tampoco estaría. La alternativa ha sido apostar por Toni Comín, también en el exilio y número tres de la lista, pero pocas horas antes del debate la JEC ha prohibido su participación. La respuesta de JxCat ha sido enviar su número siete, Aleix Sarri, que ha llegado directo del aeropuerto. Ha aterrizado proveniente de Bruselas, donde se ha reunido, justamente con Puigdemont.
No hacía ni cinco minutos que había arrancado el debate que ya ha habido el primer estruendo. En su intervención inicial, Aleix Sarri ha anunciado que "yo ahora me marcharé de este plató", porque "es intolerable en un estado democrático" que no se permita debatir a dos cabezas de lista en campaña, "no podemos pasar esta línea roja". Eso sí, antes de abandonar el estudio ha entregado al moderador, Xavier Coral, un USB con la grabación del minuto de oro del president Puigdemont para emitirlo al acabar.
Jordi Solé, el tercero de la lista de ERC que ha participado sustituyendo Junqueras, ha explicado que "nosotros no desperdiciaremos ninguna oportunidad para dar voz al independentismo". Eso sí, también ha dado un pendrive con una grabación del presidente de los republicanos para poner en el momento de la última intervención. El morbo de saber si TV3 osaría o no proyectarlos al final, ha contribuido a que muchos aguantaran enganchados a la pantalla, tragándose tramos más densos sobre economía, Brexit y directivas europeas.
Junqueras sí, Puigdemont no
La dirección de TV3 ha optado por no emitir el vídeo de Carles Puigdemont porque JxCat ha abandonado el debate. En cambio, sí que ha distribuido el de Oriol Junqueras. El presidente de ERC ha pedido a los electores que pongan en valor "cuánta fuerza de voluntad hace falta para seguir defendiendo lo mismo desde la prisión" y ha prometido que "si no nos hemos cansado ni acobardado desde la prisión, no lo haremos nunca". Al mismo tiempo, ha recordado que "nos están pidiendo 25 años y seguimos pidiendo lo mismo". Un minuto de oro que cobra más valor todavía para ERC, teniendo en cuenta que Puigdemont ha quedado finalmente excluido.
El PP alaba a Junqueras y demoniza a Puigdemont
El PP ha enviado al debate a su número dos, Esteban González-Pons, que por cierto ha acabado con una intervención íntegramente en catalán pidiendo dejar atrás el odio y recuperar la Catalunya de todos. Bregado en eso de los debates, ha arrancado hurgando en la pugna Puigdemont-Junqueras asegurando que no es lo mismo la prisión que "una mansión en Bruselas". Con grandes dosis de cinismo ha afirmado que "Oriol Junqueras y Carles Puigdmeont no están en la misma situación, porque ERC está aquí y el partido de Puigdemont que no sé ni como se llama, no está". Y ha añadido que "Junqueras no está porque el horario de la prisión no lo permite, Puigdemont no está porque está fugado, porque quería hacerlo desde el sofá de casa y eso le daría ventaja". En este sentido, ha defendido que "el vídeo de Junqueras sí que se puede poner, pero el de Puigdemont no". Además, ha acusado al expresident de parecer el "Star Treck, que sólo aparece por vídeo" y de ser "un especialista en huir y dejar ERC sola ante el peligro".
El candidato de ERC se ha apresurado a librarse de estos elogios envenenados, afirmando rotundamente que "yo nunca compararía situaciones de padecimiento" y recordando que su partido fue clave a echar "al gobierno más corrupto de Europa", el del PP de Rajoy.
Por parte de Ciutadans, Jordi Cañas ha mordido con contundencia todo el que oliera a independentismo. Se ha quejado de que este movimiento "lleva 35 años desprestigiando España en Europa" y se ha felicitado del "fracaso del golpe de estado de 2017", refiriéndose a la Declaración de Independencia del Parlament. En la línea de los debates de Rivera con Sánchez (y de Arrimadas con Batet), ha centrado las críticas en el candidato socialista, Javi López, acusándolo de gobernar gracias al apoyo "de los golpistas".
El representante del PSC ha tratado de coger el camino del medio, de la mano del de los comunes, Ernest Urtasun. Los dos han apostado por la vía del diálogo. Eso sí, con matices. López ha alabado la figura del cabeza de lista de los socialistas en Europa, Josep Borrell, "hoy el catalán de la UE más influyente y universal" y ha apostado para que el conflicto Catalunya-Espanya se resuelva de puertas adentro y no haciendo entrar a Europa. Urtasun, en cambio, se ha mostrado partidario de que en el Parlamento Europeo haya grupos comprensivos con el diálogo y ha invitado a "hacer propuestas y mirar al futuro".
Las lecciones del Brexit y el CATèxit
En estas elecciones europeas votarán 400 millones de personas. Entre estas, los ciudadanos británicos. Como no ha habido acuerdo todavía para materializar el Brexit, el Reino Unido participará de las elecciones del domingo 26 de mayo, con la incertidumbre que eso representa para el futuro Parlamento Europeo, que se escoge por cinco años y que puede ver como a medio camino, los eurodiputados británicos se marchan.
Cuando se ha abordado esta cuestión durante el debate, el PP, Cs y el PSC han aprovechado para comparar el Brexit con el procés. Cañas (Cs) ha hablado de CATèxit, advirtiendo que la experiencia británica "es la prueba de que no hay ningún divorcio bueno" y que "levantar fronteras es siempre un mal negocio", por eso, ha invitado a los independentistas a reflexionar. En la misma línea, González-Pons (PP) ha valorado el Brexit como "la demostración de cómo el nacionalismo puede llevar a una nación próspera a la ruina" y ha advertido a los escoceses de que si quieren volver a entrar en Europa deberán ponerse en la cola, "por detrás de Serbia". Javi López ha cuestionado y comparado la apuesta unilateral del Brexit y los independentistas catalanes".
En el otra lado, Solé (ERC) ha puesto en valor el proyecto europeo y ha valorado positivamente que el Brexit ha cohesionado la UE, "porque ahora todo el mundo sabe que no valen los discursos frívolos que dicen que uno no se puede marchar de un día para el otro. Por el camino de en medio, Urtasun (comunes), se ha mostrado partidario de un segundo referéndum.
Por cierto, la nota de color... Bueno, de blanco y negro: hoy en el plató de TV3, todo hombres. ¿La Europa del futuro?