El president, Carles Puigdemont, ha recurrido hoy a una estructura propia de los evangelios para replicar a la ofensiva del Estado contra el procés, después de que hoy el exministro José Manuel García-Maragallo ha revelado que ante la consulta del 9-N apostó por suspender la autonomía, destruir las urnas e intervenir a los Mossos, y que volvería a proponer lo mismo al presidente español, Mariano Rajoy, para evitar que se lleve a cabo el referéndum.
Por su parte, la portavoz del Gobierno, Neus Munté, ha tildado de "insulto" que el exministro y diputado del PP en el Congreso haya propuesto requisar las urnas y asumir 24 horas el control de los Mossos para evitar que los catalanes puedan ir a las urnas para pronunciarse sobre la independencia.