Carles Puigdemont planta cara a Marine Le Pen desde la ciudad de París. El president en el exilio no se ha quedado callado y ha contestado a las amenazas de la líder de la extrema derecha francesa, que este lunes lo ha involucrado en su campaña electoral. En una entrevista en El Periódico, Le Pen ha afirmado que, si gana los comicios, no permitirá que Puigdemont opere libremente en el país. "Seremos implacables con todos aquellos que ataquen las instituciones legítimas de su país, especialmente si son países amigos y socios", ha añadido la política, muy próxima a Vox. Por su parte, Puigdemont, que se encuentra en París, ha hecho un tuit tildando a Le Pen de "títere de los franquistas de Vox" y ha ido más allá avisando de que no se quedará de brazos cruzados y dará guerra. "No solo pienso volver, sino que plantaré cara a todos los intentos de aplicar leyes franquistas que impiden la libertad de movimientos a los ciudadanos europeos", ha sentenciado el president en el exilio.

De momento, Le Pen es la favorita para ganar las elecciones legislativas francesas del 30 de junio. Los comicios los convocó el presidente de Francia, Emmanuel Macron, después de que Agrupación Nacional (RN) doblara en votos a su partido en las europeas del pasado 9-J.

Le Pen, un "títere de los franquistas de Vox"

En la entrevista, la líder de la extrema derecha francesa ha afirmado que es "vergonzoso y humilla a Francia" que Puigdemont haya tenido su base de operaciones en la Catalunya Nord durante la campaña de las elecciones catalanas. Además, cuando se le ha preguntado sobre el liderazgo de Pedro Sánchez, la de extrema derecha ha añadido que si fuera española, "sin duda lucharía al lado de Vox contra un gobierno socialista extremista, que no solo ataca a los intereses de su país, sino que también fomenta una política europea particularmente venenosa".

La izquierda francesa sale a la calle para frenar a Le Pen

Miles de franceses ya han salido a la calle para mostrar su oposición a la extrema derecha, que amenaza con consolidar su fuerza en el palacio del Elisio y hasta gobernar. La última manifestación se celebró el sábado pasado y reunió a 250.000 personas contrarias a Le Pen.