La sociedad alemana se alza contra el auge de la extrema derecha. Después de que una investigación periodística destapara que el partido de extrema derecha Alternativa por Alemania (AfD) que miembros de la formación debatieran planos para expulsar millones de inmigrantes, incluidos ya nacionalizados. Las protestas han sido animadas por el mismo canciller Olaf Scholz a través de un mensaje público en que ha calificado los planes de la extrema derecha como "diabólicos". Carles Puigdemont se ha hecho eco y ha apuntado que este mensaje de Scholz animando a protestar en el Estado español sería percibido como un acto de terrorismo, comparándolo con su propia situación. "En el Estado español sería acusado de terrorista para incitar a manifestarse y protestar", ha apuntado en un mensaje a través de las redes sociales.
"Por suerte, Alemania tiene jueces democráticos y una separación de poderes impecable", continúa el mensaje de Puigdemont, donde las comparativas entre las dos justicias las hace desde sus propias vivencias, según él mismo remarca al final de su mensaje: "Las dos cosas las digo por experiencia propia". Todo se encuadra en la cruzada del juez Manuel García-Castellón para vincular el caso de Tsunami Democràtic con un posible delito de terrorismos.
En el estado español sería acusado de terrorista para incitar a manifestarse y protestar. Por suerte, Alemania tiene jueces democráticos y una separación de poderes impecable. Las dos cosas las digo por experiencia propia. https://t.co/aQdujUHdNW
— krls.eth / Carles Puigdemont (@KRLS) January 20, 2024
Miles de alemanes salen a la calle
Con lemas como "prohibición de la AfD", "ya todos contra el fascismo","unidos contra el odio" o "nunca más", 50.000 manifestantes protestaron el viernes en Hamburgo, mientras que el fin de semana pasado lo hicieron, 25.000 en Berlín y 30.000 en Colonia para mostrar su indignación por esta información publicada por el portal de periodismo de investigación Correctiv. Hay 178 manifestaciones previstas hasta finales de mes, entre ellas más de ochenta este sábado y domingo en ciudades como Hannover, Múnich, Stuttgart, Dresde, Frankfurt o Núremberg. En Potsdam asistieron a la protesta la ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, y el canciller alemán, Olaf Scholz, que hizo un llamamiento a sus redes a los demócratas a unirse y a demostrar que Alemania "ha aprendido del pasado".
En el mensaje de Scholz que grabó en motivo de estas protestas, al canciller observación: "Si hay alguna cosa que nunca más podrá tener cabida en Alemania es la ideología racial nacionalsocialista". En el mismo vídeo, se dirige directamente a las personas migrantes, objetivos de la AfD: "Quiero decirlos a todos: Ustedes son parte de nosotros. Nuestro país los necesita".