El presidente en el exilio, Carles Puigdemont, ha celebrado la desestimación por parte del Tribunal Constitucional (TC) del recurso de amparo del conseller Jordi Turull contra la sentencia del procés. Para Puigdemont, este hecho representa el inicio de "otra partida en campo neutral", dado que se ha abierto la vía para llevar el caso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
Una partida "sin árbitros comprados"
Así lo ha expresado a través de una publicación a su perfil de Twitter. El presidente ha hecho referencia a la noticia y ha añadido el siguiente comentario, dirigiéndose al preso político:
"Empieza otra partida, ahora en campo neutral y sin árbitros comprados. Sin que el grito de guerra ¡aporellos! que bendijo al rey sea escuchado. ¡Vamos Jordi Turull!".
La celebración de Turull
La resolución ha provocado una mezcla de sentimientos en el conseller encarcelado. "Por fin podremos ir a defendernos delante un tribunal serio y reconocido", ha sido la reacción que Turull ha hecho llegar a su pareja, Blanca Bragulat, a través de una llamada telefónica. Bragulat lo ha explicado en una entrevista al programa Tot es mou de TV3, donde se ha mostrado contenidamente contenta para llevar el caso del 1-O en Europa.
El paso a Europa
Los líderes independentistas podrán, después de un año en el que el TC había mantenido en un cajón su proceso, dar el paso a Europa.
Se trata de la tercera resolución de un recurso de la sentencia del procés. Las dos primeras fueron las de Meritxell Borràs y Carles Mundó, los dos condenados por desobediencia, pero que no están en la prisión.
Todavía no hay sentencia, pero si resolución y notificación a los abogados, que han recibido la decisión del tribunal, que no ha estado por unanimidad. Hay dos votos particulares, de los magistrados Juan Antonio Xiol y de la magistrada María Luisa Balaguer. Los argumentos de la decisión se sabrán los próximos días, cuando el TC haya redactado la sentencia.
Derechos vulnerados
Turull presentó su recurso de amparo junto con Jordi Sànchez y Josep Rull, por vulneración de derechos fundamentales contra la sentencia del Tribunal Supremo del 14 de octubre del 2019. Los tres consideran que se han vulnerado sus derechos a la no discriminación por razones lingüísticas, a la libertad ideológica, a la libertad, a los derechos de reunión y manifestación, a la tutela judicial efectiva y a un proceso con todas las garantías y a la legalidad penal.
En el recurso se pedía que se repare esta vulneración de derechos declarando nula la sentencia del juicio al procés. El escrito enumeraba hasta once vulneraciones de derechos.
Turull alegó que se ha vulnerado el derecho a la legalidad con relación a los derechos fundamentales de libertad, reunión pacífica y libertad de expresión e ideológica "por la insuficiente taxatividad del tipo penal de sedición". Así sostiene que el tipo penal de sedición aplicado a los condenados no es "respetuoso" con el grado de determinación que se espera de un precepto penal que impone penas tan graves.