Carles Puigdemont ha llegado a Barcelona después de casi siete años en el exilio. Rodeado de la cúpula de Junts, ha conseguido llegar entre gritos de apoyo de los presentes hasta el escenario preparado en el Arc del Triomf, desde donde ha pronunciado su discurso de retorno. Su objetivo era asistir a la sesión de investidura de Salvador Illa, pero Puigdemont no se ha unido a la delegación de Junts que ha caminado hasta el Parlament y no se lo ha vuelto a ver. Nadie sabe cómo, pero ha subido a un vehículo de color blanco, y después de hacer varias vueltas por el entorno del Parlament, donde ha sido detectado por los Mossos, ha desaparecido. La policía catalana ha activado la operación jaula en toda Catalunya con la intención de detenerlo, pero sin éxito. A primera hora de la tarde, un juzgado de guardia de Barcelona ha ordenado los Mossos d'Esquadra detener a Jordi Turull, secretario general de Junts, por su presunta colaboración con la salida de Puigdemont.