El vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, ha dicho este miércoles que el ejecutivo reclamará "explicaciones por el déficit en infraestructuras que Catalunya sufre por parte del Estado año tras año" en la subcomisión de la bilateral de infraestructuras. Uno de los puntos que estará sobre la mesa será la Ronda del Vallès después de que la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, anunciara que el Gobierno financiará las obras de la B-40 proyectadas por el Gobierno. Tal como informa la ACN, en una atención a medios en la futura estación de Camp Nou de l'L9, Puigneró ha dicho que espera que el Gobierno entregue "detalles por escrito y compromisos en firme" respecto de la B-40 "antes de pronunciarse sobre el proyecto". "Queremos garantías, estamos cansados de anuncios que acaben en nada", ha dicho.
El conseller de Polítiques Digitals i Territori ha asegurado que "es evidente que este ramal es muy necesario para el Vallès" para descongestionar la C-58 y las autopistas AP7 y A2; ha advertido que la Generalitat revisará que se den "las garantías tanto bisiesto como de recursos económicos para llevarlo a término". "No queremos anuncios, sino compromisos firmes y por escrito de estas voluntades expresadas", ha reiterado. Puigneró ha añadido que en Catalunya faltan muchas infraestructuras – "la mayoría de las cuales son competencia del Estado" – que ayudarían a descongestionar la AP-7, después de semanas de colapso. Una de las inversiones más necesarias está en Rodalies que "es un desastre". "Si no mejoramos Rodalies, estamos condenando a mucha gente a utilizar el coche", ha dicho. "Hay un déficit de inversión estructural por parte del Estado en infraestructuras y eso se tiene que resolver. El resto serán parches", ha concluido.
Puigneró ha hecho estas declaraciones una semana después de que él mismo y la coordinadora del Corredor Mediterráneo de la Comisión Europea, Iveta Radičová, estiraran España de las orejas por la falta de inversiones del Estado en esta infraestructura básica para Catalunya, el conjunto del Estado y la Unión Europea. Por ejemplo, de las 33 actuaciones que la Agenda Catalana del Corredor Mediterráneo del año 2011 señalaba que estuvieran ejecutadas en el 2020, solo dos se han puesto en servicio de manera incompleta. "¿Qué problema hay para que los tres puertos más importantes del Estado -Barcelona, Tarragona y València- no estén conectados entre ellos con el alta velocidad?", se preguntó entonces Puigneró en un acto celebrado en el Recinto Modernista de Sant Pau de Barcelona.
Por su parte, Radičová se preguntó "qué problema hay" para que el Estado no invierta lo que tiene que invertir en el corredor. Aseguró que a menudo observa que "la diferencia de prioridades entre los gobiernos nacionales y los gobiernos regionales" es lo que más obstaculiza que saquen adelante algunas infraestructuras. Es por eso que instó la Generalitat y La Moncloa a identificar cuáles son los problemas reales que impiden la ejecución total del corredor mediterráneo.