El president del Parlament, Josep Rull, ha presentado este martes un plan de acción climática que se tiene que aplicar hasta el 2030. Se trata de toda una serie de iniciativas para luchar contra los efectos del cambio climático. "Es un punto de partida", ha dicho Rull. Acompañado de los otros miembros de la Mesa, el president del Parlament ha explicado que el objetivo es conseguir una cámara catalana neutra de carbono. "Que sea ejemplar e inspiradora para el conjunto del país", ha reivindicado Rull en una rueda de prensa, en la cual ha recordado que el Parlament de Catalunya aprobó la primera ley contra el cambio climático del sur de Europa en el año 2017 con el liderazgo del Govern de Carles Puigdemont. "Fue una ley pionera, hecha con mentalidad de Estado", ha dicho el president de la cámara catalana.

La hoja de ruta consiste en varias actuaciones en el edificio del Parlament hasta el 2030, pero también incluye un plan de desplazamiento de Empresa con el fin de conocer y cambiar los hábitos de sus trabajadores e incluso diputados. De hecho, por eso, la cámara catalana ha impulsado una encuesta para conocer el transporte que utilizan todos los miembros que forman parte del Parlament de Catalunya. "Es lo más complejo y lo más relevante que afrontaremos en los próximos años", ha dicho Rull, que ha admitido que habrá que impulsar iniciativas para incentivar el uso del transporte público. Precisamente, hasta ahora la cámara catalana ha instalado dos cargadores para vehículos eléctricos y se ha hecho una preinstalación para dos cargadores más situados en el pasillo lateral izquierdo del perímetro técnico de seguridad. El uso de los cargadores es actualmente para la flota propia del Parlament. Además, se ha habilitado un punto de reparación de bicicletas dotado con un inflador y herramientas para pequeñas reparaciones. Pero la cosa no se queda aquí. El objetivo es la electrificación del 100% de la flota de vehículos, ampliar las estaciones de recarga de vehículo eléctrico y facilitar, todavía más, la utilización de los cargadores eléctricos. Las emisiones totales de gases de efecto invernadero del Palau del Parlament durante el 2023 fueron de 177 toneladas de CO2 equivalentes teniendo en cuenta solo las emisiones asociadas directamente a la actividad de la institución.

 

El plan incluye cuatro grandes ejes

De momento, el plan no incluye el presupuesto necesario para desplegar las medidas ni tampoco cifra la reducción de gases de efecto invernadero que se quiere conseguir, pero incluye hasta cuatro grandes ejes: la transición energética, la economía circular, la movilidad sostenible y la pedagogía. Con este objetivo, las líneas de actuación se estructuran de acuerdo con los ámbitos estratégicos de la institucionalización del plan, la energía, el palacio, recursos y residuos, movilidad, economía verde y comunicación.

En el ámbito de la institucionalización, el Parlament quiere introducir un estudio medioambiental en las iniciativas parlamentarias. "El objetivo es que el Parlament de Catalunya tenga un compromiso estructural en la lucha contra el cambio climático. Que gobierne quien gobierne tenga una mirada climática", ha dicho Rull, que ha admitido que es un edificio complejo en este aspecto. También se quiere incluir la participación ciudadana en el ámbito de la descarbonización de Catalunya y establecer información en la web del Parlamento, junto con una agenda exterior con una línea de trabajo o impulsar premios a iniciativas ambientales. De hecho, Rull ha puesto el ejemplo del Parlamento de Gales como la cámara europea más verde: "Iremos a visitarlo, saber qué hacen y compartir estrategias", ha dicho el president del Parlament.

Un Parlament más verde

El Parlament también hará una evaluación anual de las emisiones, contratar un suministro de energía eléctrica con garantía de origen 100% de fuentes renovables, así como invertir para reducir la demanda energética de los sistemas de ventilación e iluminación, ajustando las condiciones de confort climático o sustituir las dos calderas de gas por otros de alta eficiencia.

El edificio del Palau del Parlament también tendrá un papel importante en este hito. Y es que se quiere sustituir las de balcón de los pasillos laterales del hemiciclo e impulsar fachadas verdes a la edificación anexa del Parlament. El plan también concreta una cubierta verde a la nueva edificación del patio posterior sur, así como un ajardinamiento de la cubierta de la actual biblioteca y el uso de agua freática para el riego de los patios ajardinados. Con respecto a la economía verde, el objetivo es alcanzar el 60% de los contratos ambientalitzatdos y promover medidas de contratación ambiental en los contratos de restauración y limpieza.