El presidente Mariano Rajoy ha hecho un llamamiento desde los pasillos del Congreso para que los ciudadanos que sean llamados por el Govern a ocupar las mesas electorales durante el día del referéndum, ignoren la petición. "Aprovecho para decir que si alguien es llamado a una mesa electoral, que no vaya, el referéndum no se producirá, sería un acto ilegal", ha sentenciado. Rajoy ha asegurado que "daba igual" si se declaraban insumisos los representantes catalanes ante las sentencias del Tribunal Constitucional suspendiendo las leyes de desconexión "porque España es una democracia, y la ley se hará cumplir", ha recordado.
El presidente ha añadido más tarde que tanto jueces como fiscales, como el mismo Ejecutivo harían cumplir la legislación y no tolerarían "la ley de la selva", así como tampoco comportamientos antidemocráticos, como ahora considera que fue la votación de las leyes de desconexión –Referéndum y Transitoriedad– en el Parlament la semana anterior. "En seis horas fabricaron una nueva Constitución", ha denunciado.
"La Constitución está para defenderla, no reformarla"
Rajoy ha vuelto a dar largas a la petición de Ciudadanos de reformar la Constitución, durante la sesión de control en el Congreso de los Diputados. Albert Rivera, el líder del partido naranja, ha preguntado cuándo cumpliría esta parte del acuerdo de investidura, donde el Gobierno se emplazaba a revisar la Carta Magna. Rajoy se ha vuelto que no se cerraba a hablarlo, pero en estos momentos la prioridad no era "reforma la Constitución", sino "defenderla" frente aquellos que querrían "liquidarla", en alusión al referéndum del 1 de octubre.
A Rivera no le ha caído bien la respuesta y le ha increpado, alegando que ellos no querían una comisión "show", como a su parecer pedía al PSOE, sino para llamar a los "más prestigiosos constitucionalistas" a debatir sobre la reforma constitucional.