La historia se repite. Diálogo sí, pero con condiciones. La primera, que se respete el ordenamiento jurídico español; la segunda, que "no insulte a más españoles". El presidente español, Mariano Rajoy, estaría dispuesto a reunirse con el presidente investido, Quim Torra, según adelanta El Independiente, siempre y cuando no saque ningún tema que represente hablar de situaciones que puedan producirse fuera de la ley.
La idea del gobierno Rajoy es, según fuentes gubernamentales consultadas por el diario citado, "no dar argumentos al independentismo que le sirvan para justificar políticamente su enfrentamiento con el Estado español". Ahora bien. Los del PP trasladarían a Torra el mensaje ya conocido y repetido durante años por su ejecutivo y es que no escucharán ninguna propuesta fuera de lo que establece la norma suprema española.
A pesar de asegurar que "juzgaré hechos" y no intenciones, Rajoy tiene claro cuál es el objetivo del Govern Torra y, después de decir el sábado que no le gustaba el primer discurso de investidura del president de la Generalitat, ayer ya advirtió otra vez que "garantizo que la ley, la Constitución española y el resto del ordenamiento jurídico se cumplirán".
Dialogar (de todo)
Torra ya puso de relieve ayer que estaría "encantado" de reunirse con Rajoy y de "quedar mañana mismo en la Moncloa para hablar" y recuperar, así, el diálogo bilateral. De momento, sin embargo, no ha recibido la llamada del presidente español, que se reunirá primero con sus compañeros de bloque del 155, el PSOE y Cs, para analizar el discurso del president investido y preparar, por si acaso, una nueva aplicación de la norma suprema en caso que Torra traspase las líneas que ellos consideran rojas.
Antes, sin embargo, el rey Felipe VI tiene que firmar el nombramiento de Torra como 131º president de la Generalitat para que salga publicado tanto al Diario Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) como el Butlletí Oficial de l'Estat (BOE) para que sea efectivo y Rajoy pueda firmarlo también.
De hecho, ayer, el jefe del gobierno del PP ya ofreció ayer "entendida y concordia" en Torra después de que fuera investido, pero insistió en qué garantizará que en todo momento cumpla la ley y la Constitución. "Pero de la misma manera que digo eso, y lo digo porque lo siento, yo garantizo que la ley, la Constitución española y el resto del ordenamiento jurídico se cumplirá. Y creo que es bueno -ha precisado- para que nadie se sienta engañado que haga esta afirmación", sentenció.