Un libro de la editorial francesa Belin Éducation ha añadido un artículo del periodista Ignacio Escolar donde defiende la libertad, también de expresión, de los raperos Valtònyc, Pablo Hásel y César Strawberry. Todos ellos, con más o menos problemas con la justicia española, han estado en el punto de mira por criticar la monarquía y los borbones. El libro quiere que el alumno francés que estudia la lengua castellana analice y aprenda un vocabulario nuevo con términos como violencia, defensa, injurias, crítica o vulgaridad.
Y va más allá pidiendo en uno de los ejercicios que, después de comprender el contenido del artículo, se debata en clase sobre los argumentos que puede tener la defensa de Hásel y la fiscalía española para ganar, respectivamente y con sus propias palabras, el caso.
El texto de Escolar es una cita del artículo que publicó eldiario.es el pasado 2 de marzo de 2018. Este tilda de "maleducado y trol" el rapero Hásel pero a la vez defiende la libertad de este y los otros dos raperos y denuncia la falta de expresión que tiene la cultura musical en el estado español: "Los países del mundo se dividen en dos. Aquellos donde las injurias y las calumnias se castigan con una multa o una indemnización para los injuriados, y otros donde lo que dices o escribes te puede llevar a prisión". Y define a España como un país "de formas autoritarias que está sufriendo una gran involución. Un lugar donde la libertad de expresión está seriamente amenazada y en cuestión".
Para alusiones, Valtònyc ha agradecido a través de Twitter el ejercicio que esta editorial francesa plantea a los alumnos: "Mientras España nos persigue por terrorismo, en Francia muestran las vergüenzas de un estado represor que no respeta la libertad de expresión como derecho fundamental. Fragmento de un libro educativo para niños de 17 años que quieren aprender español. Merci beaucoup".
El president Carles Puigdemont también ha alabado la tarea educativa francesa y la ha contrapuesto con la que se ha vivido en Catalunya en ciertos momentos: "Si en algún lugar el debate tiene que ser incentivado, sobre todos los temas, es en las aulas. En Catalunya ha habido docentes perseguidos y criminalizados por poner a debate lo que en Francia está en libros educativos".