Elecciones cruciales para la estabilidad del gobierno de Pedro Sánchez. Segunda oportunidad de llegar a la presidencia de la Generalitat para Carles Puigdemont. Ocasión de medir la fuerza del independentismo tras los indultos y la amnistía. Un capítulo más del enfrentamiento entre los dos grandes partidos independentistas. Estos son los argumentos que manejan las agencias internacionales de noticias, que suministran información a la mayoría de los medios de comunicación del mundo.
Las elecciones al Parlament “ofrecen una nueva oportunidad al líder separatista exiliado”, la “posibilidad que vuelva al poder [Carles Puigdemont], que lideró el intento de secesión de 2017, o bien un gobierno anti-independentista liderado por el Partido Socialista”, decía el texto que la agencia de noticias británica Reuters ha mantenido este domingo en la portada de la sección de noticias europeas.
La agencia ofrece las dos narrativas principales de estas elecciones. Prioriza la competencia dentro del independentismo. Junts es calificado de partido “de línea dura”, mientras que ERC es “el rival más moderado que actualmente gobierna la rica región”. La segunda narrativa examina la actuación del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, y el “sorprendente parón de cinco días” al inicio de la campaña electoral. “Un gobierno catalán encabezado por los socialistas de Pedro Sánchez pondría fin a una década de gobiernos separatistas que han sacudido la política española, y reivindicaría su enfoque conciliador”.
Hacia el final, sin embargo, avisa de que la realidad no es tan sencilla: “Quien gane probablemente tendrá que gobernar con alianzas… La votación del domingo anuncia el inicio de negociaciones para una coalición que se alargarán bastante”.
“Los catalanes votan para medir la fuerza del movimiento separatista y el grado de reconciliación con España”, titula la estadounidense Associated Press, la mayor agencia del mundo. Es el mismo planteamiento que Reuters, más amplio y despersonalizado, sin Puigdemont. “La elección será un examen tanto de la fuerza del movimiento separatista como de las políticas del primer ministro Pedro Sánchez”. La agencia recuerda que se presentan nueve partidos con opciones de obtener representación y no se espera que ninguno ni se acerque a la mayoría absoluta. “Saber pactar será fundamental”, concluye.
El texto de AP mujer más peso al relato más españolcéntrico. “La amnistía forma parte del intenso empuje de Sánchez para reducir las tensiones a Catalunya, que también incluye el indulto de líderes separatistas encarcelados. Si los votantes no lo validan dando su apoyo al partido socialista, sería un golpe para el líder que encabeza un gobierno de coalición en Madrid”. AP incluye las que son, quizás, las mejores imágenes del día en una magnífica galería de los fotoperiodistas Emilio Morenatti y Joan Mateu.
“Los socialistas de Pedro Sánchez a la conquista de Catalunya”, dice Agence France-Presse, para quién la clave de las elecciones al Parlament de este 2024 es si el PSOE y Pedro Sánchez pueden demostrar que Catalunya ha vuelto la espalda a los deseos separatistas ganando a Carles Puigdemont, líder del intento de secesión de 2017”. El marco explicativo de la agencia francesa es Sánchez contra Puigdemont.
Con respecto al independentismo, AFP advierte que “la aritmética parlamentaria podría resultar complicada para el líder de Junts per Catalunya, que aseguró que se retiraría en caso de fracaso.” Explica también que el movimiento independentista está “socavado por las divisiones y lejos de conservar su mayoría”, especialmente porque “el partido moderado ERC, liderado por Pere Aragonès —el actual presidente autonómico— ha perdido mucho terreno”.
Para la agencia italiana Asa, las elecciones catalanas de este 2024 son cruciales para el gobierno de Pedro Sánchez, “que depende de los partidos catalanistas para mantener la mayoría parlamentaria”. A la vista de los primeros resultados, concluye que “tanto Illa como Puigdemont tendrían que negociar con más de un aliado para conseguir la mayoría en la cámara catalana”. También destaca que, en porcentaje de votos, “los partidos independentistas, que tenían la mayoría de los escaños en las anteriores elecciones, se detendrían en el 46,7% de los votos y un número de escaños inferior a 68, y podrían perder la posibilidad de repetir al ejecutivo.”