Los comensales que han asistido a la comida del Partido Regionalista de Cantabria (PRC), celebrado en un hotel del municipio de Mogro, se les debe haber enfriado el primer plato. Más de media hora de discurso del presidente cantábrico, Miguel Ángel Revilla, gritando y amenazando al resto de partidos sobre las intenciones que llevan. De entrada, ha señalado la importancia de tener una conexión ferroviaria con Madrid y Bilbao desde Cantabria pero, a la vez, que Esquerra siempre cumpla con la ley y la Constitución. Si estas dos cosas no van de la mano, Revilla advierte que no habrá acuerdo porque "prefiere quedarse sin tren a que España se rompa".
En la tradicional comida de navidad del #PRC, en el @HotelMilagros pic.twitter.com/mmLtdEvwaP
— Miguel Ángel Revilla (@RevillaMiguelA) December 15, 2019
Pero eso no es todo. Ha pedido, prácticamente suplicando, que el Partido Popular se abstenga para poder formar gobierno socialista y no depender de los independentistas. Además, ha acusado al PP de ser un grupo de "cínicos" por no facilitar la investidura a pesar de "ser tan patriotas". Y ha preguntado a los presentes si había otra solución a esta salida. El líder cantábrico tiene claro que "no pueden haber unas nuevas elecciones ya que sería un escándalo". También se ha puesto la medalla de ser el único que predeció unas elecciones el mes de abril y que él sabe "mejor que nadie" quién ganará siempre en cada comunidad autónoma.
El discurso ha tenido referencias constantes a los independentistas. Mofa hacia el presidente Torra diciendo que "encabeza los CDR" que cortan el Prat. Revilla ha hecho la comparativa del trayecto para llegar al aeropuerto catalán con la rapidez que se llega al aeropuerto de Cantabria desde la ciudad, "sólo está a 15 minutos, aquí nadie te para por la carretera". Y ha definido Sánchez como si fuera una víctima del pacto que tendrá que hacer con Esquerra porque no le queda más remedio: "Alguien cree que a Pedro Sánchez le gusta tener que depender de estos catalanes"?. El menosprecio hacia los independentistas ha llegado al clímax comparando Rufián con un "tonto que tanto insulta".