Grave error del equipo del rey Felipe VI durante su visita a Irak este miércoles. El monarca ha aterrizado esta mañana en Bagdad de imprevisto para hacer una visita sorpresa a las tropas españolas destinadas al país, acompañado por la ministra de Defensa, Margarita Robles, y varios mandos militares.

El avión en el cual viajaba llevaba a las ventanas dos banderas, una española en la derecha y una de iraquí a la izquierda. La bandera que se ha colocado sin embargo, no era la de la actual República de Irak, sino la del régimen Baazista, que dominó el país entre 1968 y 2003. Se trata de una insignia con tres franjas horizontales de colores negro, blanco y rojo y tres estrellas verdes en medio.

Esta bandera fue modificada durante el régimen de Saddam Hussein el año 1991, que añadió la frase Allahu akbar (Dios es grande) entre las estrellas. Finalmente, el país abandonó esta bandera en el año 2004, coincidiendo con el fin del gobierno baazista, con el objetivo de eliminar los símbolos que recordaran la época dictatorial.

Alud de críticas

El error ha levantado polémica en el país, hasta el punto que algunos medios y opinadores se han hecho eco. Eso ha obligado a la embajada española en Irak a disculparse públicamente a través de Twitter. En un mensaje con la bandera correcta, ha atribuido el error a los pilotos del avión y ha asegurado que será corregido a la vuelta, prevista para esta tarde.

 

Traducción: "Ofrecemos nuestras profundas disculpas por el error que nuestros pilotos han hecho esta mañana poniendo una bandera anterior de la República del Iraq durante la visita. Este error será corregido esta tarde a la salida. Mientras tanto, la visita histórica tiene lugar de una manera excelente".

El medio Kurdistán 24 hablaba de "desafortunado descuido" y diversos de sus periodistas se preguntaban "¡qué está pasando a Iraq!" y lo tachaban de "grave error". Activistas y expertos en la región también se han sorprendido que, aparte del error de la bandera, Felipe VI aterrizara vestido de militar.

Tras la polémica foto bajando del avión, el Rey ha continuado su agenda con una visita al ejército español. Una vez en la base, los militares han recibido el monarca con una sorpresa para celebrar sus 51 años, que cumple hoy, y le han cantado coralmente 'Cumpleaños feliz'.