Cuando el rey Felipe VI ha llegado esta noche al acto de entrega de los premios Princesa de Girona en Vilablareix, la delegada del Gobierno, Teresa Cunillera, era la única autoridad que lo esperaba para el protocolario recibimiento. Ni el Govern ni los responsables de los municipios donde se celebra la ceremonia. El monarca, no obstante, ha obviado durante su intervención la grave crisis política que ha provocado la grieta entre la Casa Real y las instituciones catalanas, y se ha limitado a apelar a una "Catalunya de todos y para todos" que, según ha dicho, contribuyó al "gran acuerdo de convivencia democrática y cívica en libertad, que culminó en nuestra Constitución".
Felipe VI, que ha llegado al acto acompañado de la reina Letizia y del ministro Pedro Duque, ha asegurado que con su intervención quería reafirmar el compromiso con "las señas y los valores que han engrandecido Catalunya". En el exterior del espacio donde se celebraba la entrega de premios la lluvia descargaba con fuerza. A medio kilómetro de distancia, los Mossos habían cortado la carretera de acceso ante las protestas de los CDR. El acto no se ha podido celebrar este año en el Auditorio de la Fira de Girona y el consistorio ha dejado claro que no volverá a ceder este espacio a la Fundación.
El monarca ha evocado las palabras que pronunció en su primera visita días después de ser proclamado Rey el 2014, para dirigir su apelación a una Catalunya que "ama una lengua, el catalán, que, en diálogo y convivencia permanente, sincera y enriquecedora con el castellano, es un elemento sin el cual no es posible entender la cultura de esta tierra que tanto ama sus tradiciones".
Instituciones históricas de autogobierno
"Una Catalunya con sus instituciones históricas de autogobierno y orgullosa de su personalidad", ha añadido. Y "una tierra de acogida, inclusiva e integradora, respetuosa con la diferencia, abierta y plural, que ha estado siempre a la vanguardia de la cultura y la economía".
El Rey ha pronunciado su discurso en buena parte en catalán, incluido el último tramo, que ha iniciado reafirmando los principios de la Fundación Princesa de Girona, que se creó en el 2009.
Permanencia en Girona
Felipe VI ha reiterado el compromiso con los jóvenes de Catalunya y España, "que es tanto como el futuro de nuestro país", con Girona y sus comarcas "y la vocación de permanencia de la Fundación en esta tierra".
Al tomar la palabra, el Rey ha querido agradecer "muy especialmente" a los hermanos y la familia Roca, que este año ha acogido el acto de entrega de los premios, ante la imposibilidad de celebrarlo en Girona. También antes de acabar la entrega de premios ha querido agradecer "de manera muy especial en esta ocasión" a los que han participado en el acto.
Al acabar el parlamento del monarca los asistentes le han dedicado una larga ovación. "Es un aplauso muy significativo", ha comentado la presentadora del acto, la periodista Pepa Bueno.
Esta era la segunda visita de Felipe VI a Catalunya después de que el viernes de la semana pasada el president, Quim Torra, consumó la ruptura con la Casa Real anunciando que los miembros del Govern no volverán a participar en ningún acto donde asista el monarca y que el jefe del Estado español no será invitado a actos del Govern.