Un nuevo caso excepcional que pone a prueba la libertad de expresión. El periodista Ricard Ustrell ha declarado este martes, por su cargo de responsable de la productora del programa Planta Baixa de TV3, como investigado en el juzgado de instrucción 4 de Sant Feliu de Llobregat de un delito de odio denunciado por la entidad autodenominada Brigada Els Segadors del Maresme, que se dedica a sacar lazos amarillos en los municipios catalanes, porque en un programa se la identifica con la extrema derecha. La denuncia es a raíz del programa de Planta Baixa del 23 de marzo de 2021, en el cual los periodistas Maiol Roger y Xavier Rossinyol, entrevistan al autor del libro Todo el mundo puede ser antifa y hablan de esta entidad. El abogado de Ustrell, el penalista Xavier Melero, ha explicado a ElNacional.cat, que el productor ha declarado que el programa recogió la opinión del autor del libro, Pol Andiñach, y que “es un hecho constatado”, que a Segadores del Maresme se han infiltrado componentes de la extrema derecha y que hay casos judiciales abiertos.
El juzgado ha citado a declarar como investigados a los periodistas Maiol Roger y Xavier Rossinyol este jueves. La Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) también es denunciada. El juez de Sant Feliu de Llobregat archivó inicialmente la denuncia del colectivo españolista, pero el julio pasado la sección 10.ª de la Audiencia de Barcelona le hizo reabrir la investigación para que realizara una mínima instrucción, respuesta ahora habitual y que produce extrañeza en algunos jueces instructores veteranos, ya que legamente pueden archivar denuncias de forma directa si no ven hechos delictivos.
Son aciones "ilegales"
En la entrevista a Pol Andiñach se explican acciones para combatir a los grupos fascistas de los barrios y se expone el caso de las pancartas contra una mezquita que aparecieron en el barrio de Nou Barris, que acabó con algunas agresiones. El autor del libro detalla que desde la izquierda antifascista “se señala” a estas personas y se las sigue a sus lugares de trabajo y se les hace “presión para que tengan una vida difícil”. En estas declaraciones, Roger afirma que son prácticas “ilegales” y que no hay que vulnerar la ley y el autor del libro admite que son ilegales, pero que las realizan.
A continuación, en el programa se emiten imágenes de miembros de los Segadors del Maresme, tapados con ranas de pinturas blancos y la cara tapada, que retiran lazos amarillos y los pusieron en la plaça Sant Jaume de Barceona. Y Roger afirma que en “este grupo se esconden muchos fascistas”, motivo por el cual lo denuncian por incitación al odio contra ellos. Melero ha insistido que estas personas no se esconden y hacen declaraciones a cara descubierta y que hay investigaciones que confirman que en este grupo hay integrantes de Plataforma por Cataluña y Democracia Nacional, entre otros.