La portavoz del Partido Popular, Cayetana Álvarez de Toledo, no ha seguido la última hora en Perpinyà y ha tenido una metedura de pata. Hoy ha pedido a través de twitter que el gobierno francés de Emmanuel Macron "deje claro que el prófugo Puigdemont no es bienvenido a Francia". Y exige que "lo haga en razón de su compromiso con los grandes valores europeos" que, según ella, comparten en "solidaridad democrática con España".

Pues bien, parece que Macron ha hecho caso omiso a su petición. De hecho, ayer el hombre del presidente de la República en Perpinyà, Romain Grau, recibió Puigdemont en su casa. Fue uno de los primeros encuentros que tuvo sólo aterrizar en la capital norcatalana y Grau es uno de los que ha puesto todas las facilidades para que el encuentro del Consell per la República fuera una realidad.

Romain Grau, formado en la prestigiosa Escuela Nacional de Administración francesa, es ahora candidato a las elecciones municipales de Perpinyà, actual diputado de los Pirineos Orientales y miembro de la Asamblea Nacional Francesa.

Posteriorment, Álvarez de Toledo ha querido ir más allá y también ha pedido por carta escrita la petición al Parlamento francés.