Nuevo rifirrafe del Gobierno con diputados de Junts per Catalunya y Esquerra Republicana por las palabras de los independentistas dedicadas al poder judicial. El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha comparecido este jueves en el Congreso para que la Comisión de Justicia de la cámara baja fiscalizara su trabajo al frente de esta cartera. Josep Pagès, diputado de Junts, ha criticado durante su primera intervención la "dictadura de las togas", y se ha referido a la Fiscalía como un instrumento de persecución política, aparte de referirse a algunos jueces como "prevaricadores". Ha hecho lo mismo la republicana Pilar Vallugera cuando ha denunciado el funcionamiento "antidemocrático" de la administración de justicia.
"No lo permitiré", ha respondido más tarde Bolaños cuando le ha tocado responder a los dos parlamentarios independentistas. El ministro ha reiterado que estos ataques al poder judicial "no se pueden decir en sede parlamentaria". "No se corresponde con la realidad y pido una rectificación", ha insistido el máximo responsable del departamento español de Justicia en esta comisión. Tanto Pagès como Vallugera se han mantenido firmes en sus posicionamientos. "No rectificaré", han manifestado ambos al principio de sus respectivas réplicas al socialista. El diputado de Junts ha reiterado que esta es la opinión de su partido, y ha querido concretar que es en referencia al poder judicial, y no a todos los jueces que hacen su trabajo. "Su cúpula sí que es una dictadura de las togas", ha sentenciado.
Vallugera, por su parte, ha pedido que fuera Bolaños quien rectificara por haber dicho que el procés independentista enfrentó a familias catalanas. "Es un relato que no es cierto; es el relato de PP y Vox y no me esperaba de usted que comprara el mismo marco mental", ha sostenido. No se ha quedado ahí: ha manifestado que el bajo número de independentistas que hay en Catalunya respecto al 2017 se debe a la represión ejercida por el Estado español. "Y ustedes han sido colaboradores necesarios de esta represión", ha espetado.
Bolaños no solo no ha retirado este mantra, sino que se ha reafirmado en él: "Fue una evidencia que se produjeron fracturas entre familiares y amigos, y nosotros intentamos recoser esta herida". Como contraargumento, ha señalado que precisamente el momento en el que hubo más independentistas fue el momento de mayor escalada de tensión: "Ahora que estamos en una etapa de diálogo, hay menos".
La lengua catalana en la justicia
Uno de los elementos que también ha enfrentado a los independentistas con Bolaños ha sido el uso de la lengua catalana en el sistema judicial; prácticamente ausente en los procesos que se llevan a cabo en Catalunya. Aquí el enfrentamiento ha sido cordial, en cuanto que el ministro ha asegurado que también identifica el problema y que comparte las exigencias de los diputados de Junts y ERC. Ha remarcado que el ejecutivo de Pedro Sánchez trabaja para fortalecer la lengua catalana.
"Hemos dado pasos de gigante tanto en la ley de eficiencia como en la ley orgánica del derecho a defensa", ha manifestado en una respuesta a Pagès que también ha servido para contestar a Vallugera. Ha insistido en que el ejecutivo socialista "defiende el catalán en la Comisión Europea, en el Parlamento Europeo, y se ha aprobado su uso en el Consejo Económico y Social Europeo". "Para el Gobierno, es tan español el catalán como el gallego o el vasco", ha sentenciado.