Hay malestar en el sector progresista de la magistratura y en las filas del PSOE por la decisión del Tribunal Constitucional (TC) de rechazar los recursos de Carles Puigdemont y Toni Comín contra su procesamiento por malversación grave y desobediencia. Existe la sensación de que el bando conservador del TC ha utilizado la puerta de atrás para saltarse los trámites ordinarios contra los intereses de los exiliados. El asunto todavía coge más relevancia si tenemos en cuenta que el partido de los dos eurodiputados en el exilio forma parte de la ecuación para constituir la mesa del Congreso y para la hipotética investidura. En este sentido, la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, ha señalado este jueves que lo "razonable" es que el TC hubiera esperado la reunión del pleno ordinario y no la Sala de Vacaciones, con mayoría conservadora, para decidir sobre un recurso de "trascendencia política y jurídica" como el que presentaron Puigdemont y Comín.
"Habría sido prudente que no hubiera sido la Sala de Vacaciones la que lo hubiera resuelto", ha apuntado la ministra en declaraciones realizadas durante una visita a la base militar de Retamares (Pozuelo de Alarcón, Madrid). Robles, magistrada de profesión, ha recordado que este tipo de secciones tienen que abordar "asuntos de pura tramitación, de menor incidencia," en contraste con el TC, que es un órgano "esencial" formado por doce magistrados. "Tiene una trascendencia no solo política, sino jurídica importante", ha declarado la ministra.
La claridad con la que se ha expresado Robles contrasta con la prudencia que ha demostrado su compañero, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, que ha expresado el "respeto" a la resolución del TC, por la que inadmitió a trámite el recurso en cuestión. El ministro ha trasladado "todo su respeto a la resolución del Constitucional" y se ha inclinado por no valorar "ni el auto ni el voto particular ni la decisión de la Fiscalía de recurrir". "Estoy seguro de que todas las resoluciones que adopte el TC serán de conformidad a derecho", ha concluido Bolaños.
Malestar en la sección progresista del TC
La agilidad y las prisas de la Sala de Vacaciones del Tribunal Constitucional para inadmitir los recursos de amparo de Carles Puigdemont y Toni Comín contra sus procesamientos ha causado perplejidad entre los magistrados del propio pleno del alto tribunal. En una entrevista en la Cadena SER este jueves, la magistrada progresista María Luisa Balaguer ha calificado de "inusual" esta decisión y ha admitido que puede causar extrañeza" por el hecho de que esta sección del TC "no resuelve prácticamente nada", con la excepción de asuntos o cuestiones "de otra naturaleza". Aunque el TC siempre ha sentenciado en contra de los intereses de los independentistas encarcelados y en el exilio, el tribunal siempre había admitido a trámite sus recursos, que es el paso preliminar antes de que el pleno los estudie a fondo. El recurso de la Fiscalía forzará a que el asunto se debata en el pleno ordinario a partir de septiembre.