La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha rechazado este miércoles que el Congreso investigue las actividades del rey emérito, Juan Carlos de Borbón, porque a su entender podría implicar el cuestionamiento de las instituciones españolas "y en una democracia sólida no es bueno que se cuestionen las instituciones". En este marco, ha recordado que Podemos que la posición del conjunto del Gobierno es la de dar apoyo a la "monarquía parlamentaria y al rey Felipe VI" y que es el presidente español, Pedro Sánchez, quien marca el criterio en cuestiones institucionales.

Es la reacción de la ministra al nuevo boquete en el ejecutivo español por la negativa del PSOE a dar apoyo a la creación de una comisión de investigación pedida por Podemos y los independentistas sobre las tarjetas Black del rey emérito, Juan Carlos I. Los socialistas votarán este miércoles en la Mesa con PP y Vox en contra de la propuesta aunque los letrados del Congreso han abierto la puerta por primera vez a que se constituya.

En una entrevista en Onda Cero, Robles ha afirmado que detrás de la petición de investigación sobre las actividades del rey emérito "de alguna manera se puede tratar de cuestionar nuestras instituciones". "Los comportamientos personales son diferentes, y me parecen rechazables actuaciones de Juan Carlos I, pero siempre dentro del marco de la presunción de inocencia y de la defensa de la monarquía recogida dentro de la Constitución", ha dicho.

Le ha respondido, desde Twitter, Ione Belarra, secretaria de Estado de Agenda 2.030 y mano derecha de Iglesias al Ministerio. "Que el Congreso investigue, como han reconocido sus letrados que puede hacer, las actividades presuntamente ilegales de Juan Carlos, es precisamente defender las instituciones", aseguró Belarra. Y ha lanzado un nuevo dardo contra Robles: "Proteger los privilegios y alinearse con la derecha y los ultras una vez más es decepcionante".

El PSOE vuelve a girarlo

El PSOE tumbará la comisión del rey emérito a pesar del aval de los letrados del Congreso de los Diputados, que por primera vez han dado su visto bueno. Fuentes socialistas confirman que, como hasta ahora, volverán a oponerse a su tramitación durante la reunión de la Mesa de este miércoles. En este caso la iniciativa perseguía las tarjetas opacas que usó Juan Carlos I después de su abdicación. Pero no prosperará gracias a la pinza del PSOE, el PP y la extrema derecha de Vox. Los socialistas se habían aferrado hasta ahora al criterio de los servicios jurídicos. Ahora ya no tienen esa excusa, pero han encontrado otras.