"El Tribunal Constitucional no puede prohibir el debate parlamentario y más cuando hay un interés social." Así lo ha declarado el expresidente de la Mesa del Parlament y actual conseller de Empresa, Roger Torrent (ERC), en el juicio en el TSJC, este viernes, en la última sesión que se juzga los cuatro exmiembros de la Mesa por desobediencia al TC. Torrent ha rechazado ser interrogado por el fiscal y por VOX apelando a la inviolabilidad parlamentaria que ha defendido y ha contestado solo por su abogado, Andreu Van den Eynde. El interrogatorio ha durado poco más de veinte minutos. La exsecretaria cuarta de la mesa del Parlament, Adriana Delgado (ERC), también ha optado por contestar a su abogada Olga Arderiu. Torrent y Delgado han defendido que no desobedecieron al TC y que estaban protegidos por la inviolabilidad parlamentaria. El exsecretario segundo de la Mesa y actual secretario para la Administración de Justicia, Eusebi Campdepadrós (Junts), también ha declarado solamente a su abogado, Jordi Pina, y se ha mostrado "enfadado" porque no se ha respetado su inviolabilidad parlamentaria. Cmapdepadrós ha sido acompañado por la consellera de Justicia, Lourdes Ciuró, al TSJC.
Derecho a la última palabra de Costa
El tribunal del TSJC que juzga los cuatro exmiembros de la Mesa del Parlament que presidía Roger Torrent ha ofrecido a Josep Costa que vuelva al juicio este viernes para hacer uso del derecho a la última palabra como acusado de desobediencia al Tribunal Constitucional. Costa, exvicepresidente de la Mesa y que se defiende a sí mismo, se marchó ayer del juicio, denunciando que es un "simulacro" y que se han vulnerado sus derechos. El presidente del tribunal, Carles Mir, ha informado a la vista que Josep Costa no ha querido asistir. Y se ha continuado el juicio con los informes finales.
Pluralismo político
En su interrogatorio, Roger Torrent ha declarado que en su ejercicio como presidente de la mesa del Parlament defendía y defiende, como el resto de compañeros de la Mesa, que hay que admitir todas las iniciativas parlamentarias “para proteger los derechos fundamentales y la inviolabilidad parlamentaria y de los diputados”. El republicano ha precisado que nunca prohibieron ninguna iniciativa. También ha recordado que los letrados del Parlament tenían “dudas” de si la iniciativa de Junts, ERC y la CUP sobre la defensa de la autodeterminación de Cataluña y la reprobación de la monarquía incumplía los mandatos del TC. El actual conseller de Empresa ha recordado que el pleno del Parlament ha aprobado desde 1989 resoluciones sobre la autodeterminación. Torrent ha negado que quisieran desobedecer al TC y que a parecer suyo era el pleno quien ha de tener el protagonismo, además de recordar que las iniciativas evolucionan y cambian su redactado.
Por su parte, Adriana Delgado también ha declarado que “no entendían” que la Mesa, que es un órgano colegiado, tuviera que censurar las propuestas de los grupos parlamentarios, y ha negado que quisiera desobedecer el TC. Eusebi Campdepadrós ha manifestado que en sus decisiones protegieron “el pluralismo político” y ha asegurado que la querella “es poco respetuosa con los hechos que realmente pasaron”. Campdepadrós ha asegurado que los requerimientos del TC eran “genéricos” porque los advertían que tenían que impedir acciones que vulneraran sus resoluciones anteriores, y que tampoco desobedecieron las recomendaciones del secretario general del Parlament y la moción de la CUP se votó, pero no se publicó al boletín oficial del Parlament. El representante de Junts ha recordado la jurisprudencia europea, como el caso Otegi sobre libertades de expresión y ejercicio político.