El Consejo de Política Fiscal y Financera, que reúne al Ministerio de Hacienda con las consejerías de Economía y Hacienda de las autonomías, ha dado luz verde a la condonación de 83.000 millones de euros de deuda a las comunidades autónomas en una sesión inédita. La han avalado el Ministerio de Hacienda y los tres gobiernos autonómicos socialistas: Catalunya, Castilla-La Mancha y Asturias. Sin embargo, antes de que empezara el debate, los consejeros de los territorios gobernados por el PP se han levantado y han abandonado la reunión. No han participado en la discusión, no han escuchado a María Jesús Montero y no han votado. “No vamos a ser una comparsa” y “es una tomadura de pelo”, han denunciado a la salida. Y tanto el Govern de la Generalitat como el Gobierno han arremetido con dureza contra la plantada de los populares. “Es una falta de educación y una falta de respeto institucional absoluta, se han levantado antes de que hubiera ningún debate y no han dejado que la vicepresidenta contestara”, ha lamentado Alícia Romera, la consellera de Economía y Hacienda. “Nos han dejado con palabra en la boca. Uno entiende que se puede discrepar, pero no que se falte respeto”, ha añadido. “Es una deslealtad inédita y una falta total de sentido de Estado y de responsabilidad”, ha denunciado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que les ha reprochado su “boicot irresponsable” y ha denunciado que hayan “preferido levantarse antes que quedar retratados votando en contra”.
📝 Las comunidades del PP plantan a María Jesús Montero y abandonan el Consejo de Política Fiscal
Ahora, después de este primer paso, el Ministerio de Hacienda empezará una ronda de reuniones bilaterales con todas las comunidades autónomas antes de llevar un proyecto de ley al Congreso de los Diputados. Allí, tendrá que ser aprobado por mayoría absoluta (cosa que requeriría el voto a favor de los aliados parlamentarios habituales y del PP o de Junts). Posteriormente, cuando haya llegado al Boletín Oficial del Estado, serán los gobiernos autonómicos los que tendrán que firmar, uno a uno, los convenios para beneficiarse de la condonación.
Alícia Romero: “Votar hoy en contra y dentro de unos meses pedir la condonación habría sido una contradicción”
“Lo lógico hubiera sido estar en el debate, escuchar las opiniones de todos y que cada uno votara aquello que le pareciera oportuno”, ha verbalizado a la salida de la reunión Alícia Romero, que ha lamentado el “choque que ha montado el PP”. La consellera de Economía y Hacienda ha reprobado la decisión del PP de “no escuchar y no querer tener un debate sereno sobre un tema que genera diferentes opiniones”. Y ha hecho su propia lectura sobre la decisión del PP: “En el fondo, tienen discrepancias entre ellos, votar hoy en contra y dentro de unos meses pedir la condonación habría sido una contradicción”. En su intervención durante la reunión, la consejera catalana Alícia Romero ha defendido que la condonación de la deuda es una “medida positiva” porque permitirá a las comunidades autónomas “dedicar el ahorro en intereses de la deuda a políticas públicas que tienen incidencia directa en la vida de la gente”, como salud, educación, servicios sociales e investigación.
María Jesús Montero: “Responde a la cobardía de los consejeros autonómicos”
Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda ha reivindicado una decisión “trascendente, generosa y valiente para las finanzas” de las comunidades autónomas y ha cargado contra la “dejación de funciones en toda regla” de los consejeros del PP. “Han preferido levantarse y quedar retratados que votar en contra de una medida que ellos mismos habían solicitado. Han preferido no votar en contra de algo que no pueden defender en sus territorios y hacerlo compatible con la instrucción que tenían de Génova de oponerse a la medida de condonación de la deuda”, ha sostenido María Jesús Montero en rueda de prensa. Según la ministra de Hacienda, esto ha sido la “gota que colma el vaso de las actitudes de irresponsabilidad del PP”. “Responde a la cobardía con la que los consejeros autonómicos se enfrenten a la situación imposible que pone Génova de que no defiendan intereses de su territorio porque antepongan intereses partidistas del no a todo que viene practicándonos Feijóo”, ha remachado.
Más dardos de María Jesús Montero. “Pierden autonomía política y se dejan arrastrar por consignas partidistas de Génova. [...] La instrucción de Génova está por delante de los intereses de los territorios y eso es lo grave. Como no quieren vivir esa contradicción, deciden irse”, ha lamentado. “Van a tener muchas dificultades para explicar a sus ciudadanos el espectáculo que hemos vivido hoy”, ha añadido. “Este día va a perseguir durante muchos años al PP, se ha puesto de manifiesto su total falta de sentido de Estado”, ha concluido. En relación con el nuevo sistema de financiación autonómica, Montero ha esgrimido que la condonación de la deuda “no lo paraliza y no es un atajo”, sino que “tiene que ser un incentivo para abandonar posiciones de máximos y ponerse a trabajar para que todos los territorios dispongan de más recursos”.
La asistencia de los consejeros del PP al inicio de la reunión ha permitido que se constituyera
Un detalle importante. El Reglamento del Consejo de Política Fiscal y Financiera establece en su artículo 10 que para conseguir la “válida constitución” del Consejo “será necesario la asistencia, al menos, de la mitad de sus miembros”. Eso significa que la ausencia de todas las comunidades del PP hubiera imposibilitado que se constituyera formalmente y, por lo tanto, hubiera frenado la aprobación de la condonación de la deuda. Y no ha sido así. Por lo tanto, los populares han permitido que la reunión empezara y ha sido después, cuando la aprobación de la condonación de la deuda estaba garantizada, es cuando se han levantado. “Se han visto atrapados, se han levantado para no votar, no por cabreo”, insisten fuentes del entorno de María Jesús Montero. Todo ello lleva al equipo de la ministra de Hacienda a concluir que las autonomías del PP sí que están interesadas en la condonación, pero han tenido que sobreactuar para que no las “riñan”.