Ya hay acuerdo de gobierno en Catalunya entre ERC y Junts per Catalunya para investir a Pere Aragonès. Pero en Madrid "no cambiará nada". El portavoz de los republicanos en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, ha querido dejar claro este martes que la política de los republicanos en la capital española no se verá alterada. Esta vía, ha insistido, seguirá siendo la del "diálogo" y la de "hacer política". En este sentido, se ha preguntado "cuál es la alternativa, más allá de hacer tuits".
En rueda de prensa desde la cámara baja española, Gabriel Rufián ha asegurado que esta vía "dialogada" es la que ha hecho que ERC ganara las elecciones del 14 de febrero, y por lo tanto es la vía "que tiene más confianza" entre los votantes catalanes. Si bien ha evitado poner fecha a la reanudación de la mesa de diálogo entre el Estado y la Generalitat, congelada desde hace más de un año, ha esperado que se vuelva a reunir una vez conformado el nuevo ejecutivo en Catalunya. Ha subrayado que el espacio de "coordinación" del independentismo en Madrid ya existe.
Preguntado sobre las posibles incoherencias por el pacto con Junts, con Elsa Artadi de vicepresidenta y consellera de Economía, el portavoz de ERC en Madrid ha ironizado que "quizás Junts no es tan de derechas como se dice". En este sentido, ha recordado como, a diferencia del PSOE en el Estado, la formación de Carles Puigdemont ha aprobado una ley que regula los precios del alquiler en el Parlament de Catalunya. A diferencia de otras veces, ha remarcado que en esta formación hay una "pluralidad" de espacios políticos. En cambio, otros que se proclaman progresistas "a veces no lo son tanto".
"El futuro de la política son las coaliciones de gobierno complicadas", ha insistido Gabriel Rufián.
¿Qué dice el acuerdo de gobierno?
Los republicanos han cedido en puntos primordiales de la estructura de gobierno para blindar lo que fuentes del partido han reconocido que era "la gran obsesión", eliminar todo indicio de subordinación del futuro 132.º president al Consell per la República, pendiente de reformulación, y que trabajará "en coordinación y en paralelo" al nuevo estado mayor del procés. Este nuevo espacio de coordinación estratégica velará, en la medida de lo posible, por la unidad de acción de los grupos independentistas en Madrid —en materias importantes como pueden ser los presupuestos generales del estado—, como pedía Junts. Ahora bien, si no se llega a ningún consenso, habrá libertad para adoptar posicionamientos diferentes.