A menos de un mes para la celebración de las generales del 23 de julio, los cabezas de lista de Esquerra Republicana, Gabriel Rufián y Teresa Jordà, han ofrecido una rueda de prensa para sacar pecho de los avances que ha conseguido el partido en Madrid en estos últimos cuatro años. Estos van desde los indultos, "si no fuera por la estrategia de ERC, los presos políticos todavía estarían en la prisión", ha exclamado la exconsellera; a la subida de las pensiones, el salario mínimo y la ley de universidades, ciencia o audiovisuales. Un trabajo que, según ha lamentado Rufián, a menudo han tenido que hacer solos, sin el apoyo del resto de formaciones independentistas en el Congreso, en referencia a Junts y la CUP: "Mi sensación es que durante cuatro años hemos luchado en campo contrario y muy solos; rodeados de gente que comentaban el partido desde la tribuna comiendo pipas. Les pedimos que bajen al campo con nosotros", ha reflexionado el número uno de la candidatura republicana.
Durante la rueda de prensa, Rufián ha estado repetidamente preguntado por la posibilidad de tener que investir a Pedro Sánchez después de las elecciones del 23 de julio, y él ha insistido en que esta es una posibilidad cada vez más "hipotética". No obstante, ha reiterado que lo que tiene que hacer el independentismo si se presenta este escenario, los partidos independentistas tendrían que plantear un precio más "alto y consensuado", que plantee un dilema al PSOE, pero también a Sumar: "Catalunya o Vox". Ha sido entonces cuando ha advertido que una de las posibilidades de las cuales se habla mucho menos es el hecho que sean PSOE y PP los que pacten para evitar tener que llegar a acuerdos con los partidos independentistas u otras formaciones. "No es que tengamos manía a Pedro Sánchez, es que siempre lo han hecho. Su plan A era gobernar con Albert Rivera o Inés Arrimadas. Y semana a semana ERC y EH Bildu hemos conseguido obligar al PSOE a pactar con su izquierda". En este sentido, ha señalado que lo importante es no dar fuerza a los socialistas bajo el llamamiento de un voto útil contra la ultraderecha: "Si pueden, pactarán con el PP".
Votar ERC es "combatir el fascismo"
En la misma línea, Rufián también ha hecho un llamamiento a la participación en las elecciones del 23-J, mientras una parte del independentismo hace llamamientos a la abstención para demostrar su enfado con los partidos. "Es importante ir a votar a estas elecciones, que son mucho más que eso. Nos jugamos los derechos humanos", ha señalado. Por eso, después de repasar los hitos que ha conseguido el partido en Madrid, ha insistido en la importancia "que todo el mundo sepa qué quiere decir votar a ERC el 23 de julio. Somos claros: votarnos es combatir el fascismo".