A punto de cumplirse dos años de la sentencia del procés, que condenó a los presos a casi 100 años de prisión, los exconsellers Josep Rull y Dolors Bassa "exigen" que los exiliados puedan volver a Catalunya sin sufrir "ninguna represalia" y sin pasar por una prisión preventiva. En este sentido, Bassa ha asegurado en una entrevista en Catalunya Ràdio que no desearía su sufrimiento durante los años de prisión "ni a mis peores enemigos", y por lo tanto, ni mucho menos querría lo mismo para sus compañeros de Govern exiliados en Bruselas, así como para la secretaria general de ERC, Marta Rovira, y la entonces diputada de la CUP, Anna Gabriel, en Suiza.

Por todo ello, Bassa ha reclamado una ley de amnistía, para que "puedan volver sin ninguna represión". Además, Rull ha asegurado que la "victoria" de los presos políticos ahora indultados "sería que los exiliados puedan volver sin represión", ya que eso demostraría que "nuestra persecución ha estado radicalmente injusta": "si ellos pudieran llegar sin ninguna persecución, no sería solo su victoria, sino una victoria colectiva", ha puntualizado Rull.

La exconsellera Dolors Bassa durante la entrevista en Catalunya Ràdio / Twitter

Dureza del exilio

El que fue conseller de Territori i Sostenibilitat ha querido subrayar la "dureza del exilio" con el hecho de que los presos pudieron despedir, con permisos penitenciarios, a los familiares que han muerto durante su estancia en la prisión, pero, en cambio, los consellers y el president en Bruselas no han podido hacer lo mismo, i ha puesto el ejemplo de los casos de Lluís Puig, Carles Puigdemont i Toni Comín. En el caso de este último, "tuvo que subir su hermano a morir a Bruselas"; o Valtònyc, que se tuvo que despedir de su madre por videollamada. "El exilio es durísimo y sin embargo nos ha dado unas grandes victorias", ha concluido Rull.

Preparados por si se revocan

Los consellers Rull y Bassa salieron en libertad junto con el resto de presos el 23 de junio después de un indulto parcial concedido por el Gobierno. En este sentido, aunque aseguran que "no tienen miedo" de volver a la prisión, sí que reconocen que "hay que estar preparados" por si se les acaba revocando la medida de gracia.

La presión europea, consideran los líderes independentistas, resultó clave para que Pedro Sánchez decidiera conceder los indultos, especialmente la resolución del Consejo Europeo días antes de que esta medida fuera anunciada por el presidente del gobierno central en el Liceu y lo aprobara en un Consejo de Ministros. En este sentido, sin embargo, Josep Rull destaca también los votos de dos magistrados del Tribunal Constitucional que discreparon de la sentencia, defendiendo los derechos fundamentales de Jordi Turull y argumentando que la pena de 12 años de prisión e inhabilitación por sedición es desproporcionada.

¿Volver a hacerlo?

Preguntados por si lo volverían a hacer, en referencia al referéndum del 1-O y los hechos de octubre de 2017, Bassa ha asegurado que, situándose en el 2017, "volvería a hacer todo lo que hice", añadiendo que "no buscábamos un enfrentamiento con el Estado, sino el diálogo y la negociación, pero nos vimos obligados porque en el otro lado no había nadie". "No me arrepiento de haberlo hecho, a pesar de haber pasado todo este tiempo en la prisión", ha defendido la consellera. Por su parte, Rull cree que "hacerlo diferente es hacerlo bien para ganar" y reconoce que "la declaración la tendríamos que haber hecho el 3-O".

En la imagen principal, el exconseller Josep Rull durante la entrevista en Catalunya Ràdio / Twitter