Catalunya es la decimocuarta comunidad autónoma en el ritmo de vacunación dentro del estado español, los datos la sitúan en la media tabla hacia abajo y hacen falta soluciones. La consellera de Salut, Alba Vergés, ya ha anunciado cambios pero los partidos también se empiezan a mover.
La candidata de la CUP a las elecciones del Parlament, Dolors Sabater, ha propuesto a la Generalitat la creación de una mesa de trabajo conjunta para aportar propuestas en torno a la gestión de la pandemia y mejorar la planificación de la campaña de vacunación: "Nos ponemos a disposición para dar una buena respuesta conjunta para|por el país".
Las declaraciones las ha dado en una rueda de prensa, inmersa de pleno en la campaña electoral. Sabater confirma están dispuestos a trabajar para aportar soluciones para Catalunya y esperan que el Govern la convoque, para tener en cuenta los otros "espacios políticos que no forman parte del ejecutivo, para que puedan participar en la respuesta sanitaria de esta pandemia."
Por eso también hace crítica de la situación actual. La candidata cupaire lamenta que ha habido falta de planificación por parte de ERC y Junts y que el proceso de vacunación lo ha evidenciado: "No hay confianza, se ha perdido. Sólo nos faltaba este nuevo episodio de la no vacunación. Estamos muy preocupadas porque vemos improvisación y falta de transparencia".
En la línea de los reproches de otros partidos y políticas, como la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, pide acabar con este gobierno de coalición. Sabater cree se tienen que poner de inmediato y a disposición de la salud pública "todos los recursos" necesarios.
Y añade: "No podemos rehuir la crítica a una gestión que es absolutamente insuficiente, que vuelve a poner sobre la mesa esta incapacidad de planificar y de poner todos los recursos al servicio de las decisiones del mundo científico y prever con sentido común todo lo que viene por delante" ha cerrado.
Piden explicaciones
Por su parte, el diputado de la CUP Vidal Aragonés ha pedido a la Generalitat explicaciones sobre por qué de las 60.000 vacunas previstas "sólo se han vacunado a 6.000 personas" y lo atribuye a una falta de planificación y de los medios necesarios: "Sería surrealista que la vacunación se hiciera a través de la sanidad privada y no a través de la pública. Pedimos que todos los recursos se pongan a disposición y control de la sanidad pública para dar una respuesta coherente y científica".
En paralelo, el interrogante de las elecciones sigue cerniendo sobre la fecha marcada. Aragonès pide concretar el 14 de febrero e insiste en la necesidad de que se den unos criterios objetivos para decidir si se posponen o no, ya que cree que se tiene que garantizar el derecho a la vida pero también el derecho al voto: "No nos imaginemos un escenario donde haya elecciones y en que no todo el mundo pueda tener garantizado su derecho al voto".