El diputado de ERC y miembro del equipo negociador después de las elecciones del 14-F, Sergi Sabrià, ha urgido a JxCat a pactar ya el nuevo Govern sin alargar más la negociación, ya que "no hay ningún tema atascado", y ha querido dejar claro que el acuerdo con la CUP no se toca, porque "está muy bien hecho". En una entrevista en Efe, ha admitido que a su partido no le ha gustado lo que ha pasado con la investidura fallida de su candidato a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès.

"Ahora bien, nuestra voluntad es continuar las negociaciones, aunque sea en Semana Santa, porque entendemos que el mandato de las urnas es muy claro y no contemplamos otras opciones", ha indicado.

Los republicanos son muy críticos con la forma de negociar de Junts y consideran que, de la misma manera que "en la negociación de la Mesa del Parlamento y de la presidencia de Laura Borràs se llegó al límite y no hacía falta", con la investidura ha pasado lo mismo.

"Indigestión" electoral

Sabrià ha negado que ERC haya relegado a JxCat al negociar la investidura para dar prioridad a la CUP, porque "nos hemos reunido más" con la primera que con la segunda, ha asegurado, y las negociaciones "se han llevado a cabo en paralelo". La diferencia, ha precisado, es que con los anticapitalistas las negociaciones "avanzaban deprisa", y con JxCat no, aunque han dispuesto de "cuarenta días largos".

Imagen: Elsa Artadi, Sergi Sabrià y Dolors Sabater en el Parlament de Catalunya / EFE

Según Sabrià, resulta "curioso que aquellos que tantas veces nos han dado lecciones de unidad ahora no sean capaces de hacer una digestión bien hecha de los resultados" del 14-F, que marcan que hay que hacer "un Govern independentista y de izquierdas".

"Hemos estado muchos días atascados en la cuestión de la dirección estratégica del procés, pero eso ahora ya no es un inconveniente, por lo cual no entendemos por qué no ha sido posible el acuerdo hasta ahora", ha lamentado. Ha avanzado, en este sentido, que "cuando nos volvamos a reunir les pediremos ir deprisa y al grano" y ha explicado que ERC tiene ocho documentos preparados, que van "desde el que define la mecánica del nuevo Govern hasta el del Consell per la República".

Sin calendario

Sabrià ha declinado fijar una fecha probable para conseguir una investidura efectiva, pero sí que ha considerado que la Diada de Sant Jordi, 23 de abril, le parece "muy lejos" si no aparecen nuevas "líneas rojas", por ejemplo, en torno a la estructura del Govern.

"Tenemos un proyecto muy ilusionante para poder dar un giro hacia la izquierda y aportar soluciones a los problemas de la gente, y no queremos perder ni un día más", ha recalcado, antes de reconocer que a ERC la "entristece" y la "enoja" tener que esperar, "porque los problemas de la gente no esperan".
"No queremos fijar fechas, pero hay que espabilar" y cerrar el pacto de gobierno "tan deprisa como sea posible", ha insistido, porque "sin líneas rojas no valen las excusas" y hay que gobernar sin provisionalidad.

De la mano de la CUP

Sabrià se ha mostrado muy satisfecho del acuerdo negociado con la CUP porque, según ha dicho, "está muy bien escrito y muy bien hecho", motivo por el cual "no tendría que ponerse en duda" por parte de JxCat, ya que los negociadores fueron "muy esmerados para que no hiciera imposible" su aceptación por más grupos. Considera, por este motivo, que "puede ser asumido por un gobierno que tiene que ser más amplio" y, en consecuencia, sentencia Sabrià, "el acuerdo con la CUP no se toca".

Admite que, entre Junts y la CUP hay posicionamientos ideológicos muy diferentes, "pero el país ha avanzado cuando el independentismo ha sido capaz de ponerse de acuerdo" y si bien "las diferencias entre Joan Canadell (JxCat) y Eulàlia Reguant (CUP) son enormes, tenemos que hacerlo posible".

Imagen principal: Sergi Sabrià en una intervención en el Parlament / Sergi Alcàzar