Parar los pies. El líder del PSC y jefe de la oposición, Salvador Illa, ha plantado cara al Govern de la Generalitat durante el pleno monográfico de la sequía que se ha celebrado este martes en el Parlament. Todo ello, después de que tanto el presidente Pere Aragonès como el conseller David Mascort hayan sacado pecho de la acción del ejecutivo actual fachada "la austeridad" de los gobiernos anteriores. "Catalunya está pagando las consecuencias de años de sequía de inversiones", ha recriminado anteriormente Aragonès, echando pelotas fuera. Ante este discurso, Illa ha querido parar los pies al presidente y el conseller para exigirles "un punto más de humildad". "Si tan bien lo hemos hecho, ¿por qué estamos donde estamos?", ha interrogado.
En esta línea, el jefe de filas socialista ha recriminado que, lejos de buscar soluciones internas, dependerá del exterior. "El agua vendrá de Sagunt", ha señalado, en referencia al anuncio que se traerá agua desde la planta desalinizadora valenciana. Eso sí, para tirarse flores ha celebrado que este movimiento ha sido posible gracias a "el esfuerzo" del Gobierno. También ha querido collar la administración catalana exigiendo que la Agencia Catalana del Agua "se ponga las pilas de una vez por todas, y el Govern también". "Llegados a este punto, no hay más remedio que hacerlo", ha declarado.
La crítica de Illa también ha ido en otras direcciones. Así, ha señalado que los últimos gobiernos catalanes "no han hecho los deberes en los últimos diez años". "Este ha sido el resultado del procés: hacer Catalunya más dependiente del agua", ha lamentado. También ha recriminado la falta de "celeridad" del ejecutivo de Aragonès para reaccionar ante una sequía que se ha alargado ya tres años. Además, ha hecho un llamamiento a reconducir la estrategia de las sanciones a los municipios para malgastar agua. "Naturalmente, si alguien se salta de forma flagrante las restricciones tiene que ser sancionado, pero no puede ser por norma general", ha dicho, añadiendo que parece tener el objetivo de "externalizar responsabilidades".
El buen camino: escuchar
Sin embargo, ha habido una muestra de complicidad de Illa hacia Aragonès. El líder del PSC ha asegurado que su grupo tiene la voluntad de ayudar, y ha pedido que el Govern "se deje ayudar". "Ha hablado de escuchar, va por buen camino si hace eso" ha dirigido directamente al presidente de la Generalitat. Sobre la mesa, Illa ha propuesto nuevamente poner en marcha una nueva cumbre de partidos (la última, con final frustrado, tuvo lugar ahora hace casi un año), ofreciendo a Aragonès decidir si se tiene que hacer en formato multilateral o bilateral. "No quiero ponerlo en una situación comprometida, pero tendríamos que articular mecanismos más fluidos para negociar", ha remarcado.