El Parlament de Catalunya ha reprobado esta semana a la consellera de Territori, Habitatge i Transició Ecològica, Sílvia Paneque, admemás de pedir al president de la Generalitat, Salvador Illa, su cese por el caos de Rodalies. Lo ha hecho a propuesta de Junts per Catalunya, que ha conseguido que Paneque, también portavoz del ejecutivo, sea el primer miembro del Govern Illa a ser reprobada. Uno de los diputados que más contundente se ha mostrado es Salvador Vergés, diputado de Junts per Catalunya y miembro de la ejecutiva del partido de Carles Puigdemont como responsable de infraestructuras que, en su intervención del martes, exigió echar a Renfe de Catalunya. Los juntaires consiguieron aprobar todas sus propuestas de resolución sectoriales y Vergés se muestra muy crítico con el traspaso de Rodaleis acordado entre los socialistas y ERC, carga contra Renfe y Adif y exige nuevas vías e infraestructuras a largo plazo.
Usted hizo una intervención el pasado martes pidiendo la dimisión y reprobación de la consellera Paneque, pero también exigiendo que Renfe se marchara de Catalunya después de las últimas incidencias el caos de Rodalies. ¿Qué quiere decir, exactamente, echar a Renfe de Catalunya?
Quiere decir que cualquier modelo bisiesto en el cual haya la mínima participación de Renfe i Adif, que son los que han representado el vergonzoso y humillante caos de Rodalies que estamos sufriendo, lo que hará será seguir perpetuando el problema que vivimos en Catalunya. Es un problema endémico, pero que en los últimos meses y semanas se ha agravado de una manera ya absolutamente insostenible. Queremos que cualquier modelo de gestión ferroviaria sea sin Renfe. Queremos echar a Renfe de Catalunya. Cuando decimos Renfe, también queremos decir Adif y la mano del Estado español.
Por lo tanto, que deje de ser operadora de la red ferroviaria catalana...
Exacto. En estos años se ha demostrado que lo que hemos hecho desde el Govern a través de Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya como operadora de servicio ha sido muy positivo. Ha estado muy bien valorado por los usuarios que ponen un índice de satisfacción en el último barómetro notable, enfrente de uno suspendido de Rodalies. Lo que queremos es que de la mano de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya, también de la mano de IFERCAT con respecto a la infraestructura física, que es nuestra Adif catalán, y debidamente reforzados, con formación, y con personal propio, podamos hacer nuestra política ferroviaria y que de ninguna manera tenga que haber Renfe por el medio. De hecho, en el marco europeo de liberalización, lo que se tiende es que la administración tenga gente con talento, que sean los que tengan el control desde la administración y a partir de aquí se pueda dar entrada a nuevos operadores.
En una de las propuestas de resolución, Ustedes proponían que durante esta legislatura ya se hiciera el traspaso completo. Es decir, que la operadora sea 100% catalana. ¿Cree que en tres años la formación de maquinista se habrá completado? ¿Lo ve viable? Porque uno de los principales problemas que tiene Catalunya es la falta de maquinistas, ya que dos terceras partes son de fuera de Catalunya…
No solo eso, sino que de los 700 maquinistas que hay en estos momentos en Renfe en Catalunya, unos 300 se marchan cada año por este acuerdo que hay de permeabilidad. Evidentemente, sí que es posible poder hacerlo dentro de esta legislatura. Nosotros no decimos que todos los maquinistas tengan que ser nuevos en este periodo. Fuimos muy críticos con cómo el Govern gestionó y negoció la huelga de Renfe, que claramente tuvo un viraje político. Lo que decimos es que el personal de Renfe se puede subrogar en una empresa de matriz 100% catalana de la mano de IFERCAT y Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya, y que eso no está reñido en mantenerlos y respetar los derechos laborales.
Así lo dice el Estatuto de los Trabajadores, que cuando los trabajadores se subrogan en una nueva empresa se pueden mantener los derechos laborales de estabilidad, de permeabilidad, de movilidad... Que estos activos, tanto físicos como humanos, pasen a ser de competencia absolutamente catalana y, por lo tanto, el traspaso puede ser integral, no solo de las líneas de Rodalies, sino de los servicios Avant y de los regionales que operan íntegramente dentro del territorio catalán.

¿Cree que el Govern se tendría que haber enfrentado a los sindicatos y haber sido más duro?
Nosotros no hablamos de enfrentarse. Lo que decimos es que la huelga que hubo hace pocos días de Renfe se negoció muy mal por parte del gobierno catalán. No hacía falta un enfrentamiento, sino una negociación realista donde los derechos laborales se pueden mantener y que eso no está reñido con el hecho de que el traspaso sea 100% catalán y que este personal pase a depender de una empresa que sea no mixta, sino 100% catalana.
Antes hablaba de esta subrogación. ¿Si los trabajadores no quisieran subrogarse porque gran parte de los trabajadores, tal como ha dicho, se marchan porque no son de aquí, qué solución se tendría que plantear?
Nosotros no observamos un escenario en el cual los trabajadores masivamente no quieren venir a trabajar para una empresa 100% catalana. De hecho, el convenio de Ferrocarrils de Generalitat de Catalunya no tiene ningún problema. No hay absolutamente ningún colectivo, de sanidad, educación, prisiones, que haya pedido volver a la dependencia española. Los derechos laborales no son ninguna excusa para poder negociar y para poder tener una empresa 100% catalana con bastante personal para poder operar el servicio ferroviario desde Catalunya.
Se ha hablado mucho de Renfe. ¿Pero no cree que el principal problema del caos actual de Rodalies es ADIF? Es la propietaria de las infraestructuras, quien tiene capacidad para construir nueva vía, nuevas estaciones...
En efecto. Simplificamos hablando de Renfe, pero en realidad Renfe propiamente es los trenes y el personal. En cambio, la infraestructura física de las vías, las catenarias, las estaciones... estamos hablando de ADIF. Muchos de los problemas vienen de esta falta de inversiones de esta. En todo caso, lo que es seguro es que encima de ADIF y Renfe hay el Estado español. Hay el Ministerio Transportas, con gente como Óscar Puente. Ha estado el PP, ha estado el PSOE y también ha estado el PSC, que a menudo intenta centrifugar responsabilidades y decir que eso era culpa de los gobiernos anteriores. Tenemos que recordar que del 2018 en el 2025 los presidentes de Renfe han sido personas con el carné del PSC. Este ha sido su único currículum para entrar como presidentes de Renfe. Concretamente, de Isaías Táboas y Raül Blanco. También durante tres años, la ministra de Transportes fue Raquel Sánchez, que fue alcaldesa de Gavà. Por lo tanto, el PSC forma parte del problema, y lo que ha hecho es callar, no plantarse ante Madrid, y votar a además, sistemáticamente en contra, aquí en el Parlament, cuando nosotros hemos reclamado que el Estado pague las inversiones pendientes de que es donde llora a la criatura.
Realmente, el déficit estructural de inversiones en infraestructuras en Catalunya, estos 51.000 millones de euros según la Cambra de Comerç, 50.000 según la comisión que creamos de déficit histórico en el Parlament, 40.000 según Foment del Treball, esta cifra astronómica es la que realmente acaba comportando el caos de Rodalies creciente y premeditado, como reconoció hace pocos días el mismo José Zaragoza, socialista. Los 51.000 millones de euros no son un capricho independentista, sino que acaba representando menos escuelas, menos hospitales, no poder luchar adecuadamente con infraestructuras hídricas contra la sequía, no poder invertir en vivienda pública... Acaba implicando que el país entero se hunde. Es muy complicado ser unionista en este país. Todavía más, si coges el tren cada día.
La primera consellera reprobada y a quien el Parlament pide la dimisión ha sido Sílvia Paneque, que también es portavoz del ejecutivo. ¿Cree que ha actuado como parachoques del president de la Generalitat, Salvador Illa?
Hace una semana pedimos que dimitiera porque no sale adelante. Yo mismo le recordé que lleva una cantidad de temas que es inasumible. Lleva territorio, vivienda, urbanismo, agua, energía, residuos, medio, es la portavoz del Govern y es candidata para el Partido Socialista al Ayuntamiento de Girona. Me parece que ni ella ni nadie puede asumir tantos temas de una manera eficiente. El Parlament, a petición de Junts, ha reprobado a la consellera y ha pedido al president Illa que la cese. A partir de aquí, ellos tienen que tomar las decisiones. El mandato del Parlament es muy claro en este sentido. El president Illa ha estado sin comparecer durante veinticinco días, prácticamente un mes después del caos absoluto que hubo en el fin de semana fatídico de Carnaval en Cunit, en que no apareció nadie del Govern. A partir de aquí, nosotros pedimos la comparecencia urgente del president, pero Esquerra Republicana y los Comuns quisieron protegerlo, y lo sustituyeron por un pleno monográfico de Rodalies. El president ha estado sin comparecer durante un mes ante la primera gran crisis de Govern que tiene el PSC. Eso nosotros entendemos que es absolutamente injustificado. Pero además, es una doble crisis. No solo la crisis del cese de la consellera Paneque por su incompetencia por la gestión de la crisis de Rodalies, sino también porque los socios de investidura le han pedido la reprobación. Los parlamentos son buenos para investir y también para destituir.
El president ha estado sin comparecer durante un mes ante la primera gran crisis de Govern que tiene al PSC
¿Llevarán este debate en el Congreso de los Diputados? Porque, como ha dicho usted, ADIF y Renfe dependen del Ministerio de Transporte del Gobierno. Es quien tiene las competencias...
Ya lo hemos llevado. La compañera diputada que hace un trabajo excelente, Míriam Nogueras, hacía referencia precisamente al discurso que habíamos pronunciado aquí en el Parlament y añadía más datos y más argumentos en el Congreso de los Diputados ante el presidente Pedro Sánchez. Es evidente, y tanto, que las culpas no son compartidas, pero es igual, al final el Partido Socialista es lo mismo aquí que allí. Nosotros siempre decimos, y el problema ya no es que los socialistas de aquí no quieran hacer enfadar al amo de Madrid, sino que los socialistas de aquí son el amo de Madrid. El president Illa se ha demostrado claramente que hace la función de gobernador civil y, por lo tanto, son la pata aquí del gobierno de Pedro Sánchez. Como siempre hemos hecho, todos los temas de vivienda, inmigración, Rodalies, infraestructuras... los replicaremos en el Parlament de Catalunya y también en Madrid.
¿Han hablado de Rodalies en la mesa que tienen Ustedes con un mediador internacional en Suiza?
Esta información no la tengo, no me consta y no formo parte de esta mesa. Ante el problema de Rodalies, me huelo que sí que es uno de los temas que se tratan o se tratarán allí.

¿Cree que se ha apostado demasiado por la alta velocidad en los últimos años?
Es cierto que el Estado español ha apostado mucho más por la alta velocidad que por Rodalies, pero el motivo claro está. En el Estado español lo que le ha interesado siempre es un modelo radial, centralizado en Madrid para poder reforzar y extender su dominio sobre todos los territorios. Recordamos que siempre ha priorizado la línea hacia Sevilla, que no hacia Barcelona y conectarnos con Europa. En cambio, la Generalitat, dentro de las competencias que ha tenido, lo que ha hecho es siempre invertir en Ferrocarrils de la Generalitat, en un modelo que fuera fojado, policéntrico, intermodal integrado, integral. Un modelo basado en poner al usuario en el centro. Con un objetivo de bajar los tiempos de trayecto al subir las frecuencias de los trenes. Por lo tanto, dentro de lo que ha podido la Generalitat, se ha demostrado que el modelo de Ferrocarrils de Generalitat es realmente mucho mejor que el modelo deficitario que nos ha impuesto el Estado español con unas Rodalies que efectivamente han ido a costa siempre de esta priorización de la alta velocidad.
¿Pero se pueden aumentar las frecuencias con las actuales infraestructuras que ya están colapsadas?
Nosotros lo que pedimos es un traspaso 100% catalán para que nos permita hacer política ferroviaria. No queremos de ninguna manera un traspaso como ahora lo tienen previsto en el acuerdo de socialistas y ERC, con los Comuns, que nos vayan pasando línea a línea a lo largo de los años. Siempre decimos que más que un traspaso, es un mal paso, porque lo que hace es que no solo estos pasitos nos acercan al objetivo del traspaso, sino que nos alejan, porque se enquista todavía más un modelo que es un modelo absolutamente radial, centralizado con los cuellos de botella de Barcelona. Nosotros queremos hacer una política ferroviaria por tener una visión de país en que nos reflejamos mucho con el novecentismo de Prat de la Riba y de la Mancomunidad, que tenían la nación en el corazón y tenían el país en la cabeza. Pensaban en la cohesión territorial, pensaban en la Catalunya ciudad, y lo que hacían es un sistema forjado y policéntrico, que permitiera el progreso de la Catalunya ciudad rural.
Hace falta salir de este modelo radial y resolver los cuellos de botella que hay en Barcelona, a partir de proyectar un tercer túnel que descolapse los dos túneles convencionales ferroviarios que tenemos en este momento, pero no solo que puedas hacer el bypass por el Vallès. Que también puedas resolver la R1 del Maresme, el Corredor Sur, la R3 como un eje estructural de país meridiano que nos conecte con Europa y que dé vida en las comarcas centrales y a las comarcas del Pirineo. Redundaría con unos trayectos que ya no dependen de pasar siempre por Barcelona, por lo tanto, el sistema va mucho más relajado y puedes bajar estos tiempos de trayecto. Por ejemplo, también hay que apostar por la cuadruplicación efectiva de vías entre Castelldefels y el Prat de Llobregat.
¿Está hablando de la línea del tren orbital que va de Vilanova i la Geltrú a Mataró o de la línea de mercancías de Ponent?
Sí, entre otros. Cuando pensamos en política ferroviaria, pensamos en descolapsar Barcelona. Los proyectos que hay que estudiar son la línea Orbital ferroviaria, el eje transversal ferroviario, los trenes tramo... También que las líneas ferroviarias de mercancías no sean la chapuza del tercer hilo sobre las vías de Rodalies, que lo que hará es que cuando eso entre en servicio quedará más colapsado. Reclamamos que sea una vía de mercancías separada a parte, y que vaya por fuera de los núcleos urbanos. Todas estas obras y actuaciones tienen que ir en un plan con la vista puesta de 2050. Las obras que tenemos son un desbarajuste porque el plan 2020-2030 nunca se trabajó ni consensuó con la Generalitat de Catalunya. Se fue directamente por parte del Estado español, Renfe y Adif. Lo vemos en Roda Barà o en la duplicación del R3.

¿Se está invirtiendo donde no toca?
Las inversiones que se están haciendo, bienvenidas sean, excepto como decía, la cuestión del eje transversal. Eso son pasos atrás. Invertir en un tercer hilo es perder el tiempo, es perder el dinero y es una vergüenza. Porque realmente lo que se tendría que hacer es invertir en un corredor mediterráneo que fuera una vía segregada de la de pasajeros. El problema no está en las inversiones que se están haciendo en estos momentos, sino en las inversiones que endémicamente no se han hecho.
¿Cuál es la solución a corto plazo? Porque al final construir un nuevo carril por el corredor mediterráneo o construir una nueva vía tardará unos años...
A corto plazo, nosotros hemos presentado un plan de choque. Hemos dividido Catalunya en nueve zonas, y a partir de aquí hemos trabajado unas propuestas que estén muy concretadas y que vayan mucho de la mano de las demandas que hay del territorio y de las plataformas para poder aumentar frecuencias, optimizar los servicios, mejorar la información, velar por la seguridad. Y a partir de aquí, las otras propuestas de resolución sí que son más estructurales y sí que requieren un cierto plazo. Nos quejamos y denunciamos que en este pleno monográfico de Rodalies ha quedado patente que el Govern no ha presentado un plan de choque, tampoco ha defendido un traspaso que sea catalán y que sea útil y eficiente para nuestro país y tampoco se ha plantado ante Madrid por unas inversiones que hace.
¿Los 77 millones que anunció el gobierno para la limpieza, para la seguridad, para arreglar los ascensores que no funcionan, cree que eso no es un plan de choque?
El gobierno Zapatero anunció 4.000 millones de euros y ejecutó un 14%. Vino el gobierno Rajoy e hizo otro anuncio de lluvia de millones y anunció 4.200 millones de euros y ejecutó un 6%. De 1990 a 2018, de toda la inversión de Rodalies de todo el Estado, un 50% se fue a la Comunidad de Madrid, mientras solo un 17% se fue a Catalunya. En números de Renfe y Adif, en quince años, se ha invertido en Catalunya menos de un 25% de lo que se había presupuestado, mientras que en Madrid se ha ejecutado más del 150%. Y eso en números por habitante pues estamos hablando de 250 euros invertidos por catalán y 907 euros invertidos por madrileño. Por lo tanto, que ahora nos hablen de 77 millones es el chocolate del loro ante las cifras que necesita nuestro sistema ferroviario para ponerse al día y para poder compensar este déficit de inversiones estructural y premeditado.

¿Una de las grandes soluciones también sería un tercer túnel para entrar en Barcelona?
Sí. En este momento hay el estudio de alternativas en el ámbito del Ministerio, pero hace falta que eso se lidere desde Catalunya. En Catalunya, tenemos dos túneles convencionales, uno es el de paseo de Gràcia, carrer Aragó, el otro es el de plaza Catalunya. Están los dos colapsados, se pueden hacer medidas y nosotros también estamos para que se hagan estas medidas para aumentar la capacidad, pero no será suficiente. El segundo túnel de plaça Catalunya se planificó en 1967, se ejecutó en 1972 y en aquel momento estábamos hablando de una Catalunya de 4 millones y pico de habitantes y ahora tenemos 8 millones. Tenemos unas infraestructuras que estaban planificadas cuando Catalunya tenía la mitad de habitantes de lo que tenemos ahora.
Hablábamos de la Mancomunitat. Fue durante el final del siglo XIX y principios del siglo XX, cuando se construyeron más vías, pero la mayoría de operadoras entonces eran privadas...
El primer ferrocarril de toda la península lo hizo Miquel Viada, de Mataró, y precisamente no obtuvo ningún tipo de ayuda del Estado ni ningún tipo de ayuda pública, sino que fue a buscar financiación en Gran Bretaña. Era una iniciativa privada. Eso define mucho como somos los catalanes, que Catalunya es un país de emprendedores y es un país que gracias a esta emprendeduría ha sido un país productivo.
¿Se tendría que repensar este modelo de Renfe que es todo público?
Sí. En el marco de la liberalización europea que ya se está aplicando en la alta velocidad, es el modelo que va viniendo. Es un modelo en el cual la administración no tiene que tener todo el personal y todos los recursos, sino que tiene que tener el control. Eso es muy importante, para que el servicio esté garantizado y sea un servicio básico. Eso quiere decir tener un equipo de gente, de técnicos, de mantenimiento, de ingenieros o de maquinistas, que sean propios. A partir de aquí, que se pueda dar entrada, como pasa con el alta velocidad, a otros operadores, sean públicos o privados, de aquí o de toda Europa.
Ustedes piden la dimisión de la consellera Paneque. ¿Por qué no piden la dimisión del ministro de Transportes, Óscar Puente, que al final es quien tiene las competencias?
Pedimos la dimisión de la consellera Paneque, pero ella no ha dimitido ni se han resuelto los problemas de Rodalies. Yo que tengo los avisos en el móvil, tanto de ADIF como de Renfe, y es un drama cada día.
Óscar Puente es una persona con un despotismo absoluto
¿Y el ministro? ¿Y el ministro Óscar Puente?
Evidentemente. Es una persona con un despotismo absoluto, que lo que nos viene a decir es que si queremos que no haya problemas, pues no invertirá. Eso es absolutamente injustificable y es insultante, que la persona que forma parte de los gobiernos PSC, PSOE, PP, que endémicamente no han invertido en Catalunya y que esta es la madre de los huevos, nos venga a decir que ahora porque invierte 4 euros eso es lo que nos lleva a los problemas que tenemos en este momento de caos de alrededores y que si no queremos problemas no invertirá. Es muy triste que un líder político con el cargo que él ostenta nos venga a hacer estas declaraciones a Catalunya. Y en cambio los socialistas de aquí con el president Illa al frente, no se plantan ante estas declaraciones.
Pero podrían llevar al Congreso la reprobación del ministro, por ejemplo...
Podemos reprobar a todo el mundo y podemos denunciar a todo el mundo y así lo haremos. Nosotros no hacemos distinciones entre PSC, PP y PSOE, porque al final son todos culpables y cómplices del desastre que vivimos en Rodalies. Por lo tanto, nosotros, con toda la firmeza y como hemos hecho siempre, lo que haremos es luchar contra toda esta gente.
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