El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha retado este martes al Tribunal Constitucional y ha asegurado que su ejecutivo "adoptará las medidas precisas" para reformar el poder judicial y renovar de esta manera el Consejo General del Poder Judicial y el mismo TC. No obstante, el presidente socialista ha reiterado en una declaración institucional desde el palacio de la Moncloa que su gobierno acatará la decisión de la mayoría conservadora del tribunal de garantías, que este lunes lo desafió paralizando la reforma judicial.
Sánchez ha aprovechado su discurso para poner en contexto la decisión que tomó su ejecutivo de reforma el poder judicial español. Ha recordado que el PP mantiene su bloqueo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial, y que el CGPJ también es incapaz de designar a sus candidatos para el Constitucional. "Es una situación inédita en nuestra democracia", ha dicho Sánchez, en referencia a la situación de bloqueo de la justicia española. Asimismo, ha cargado contra los populares por querer mantener en el poder a unos jueces sin respetar el mandato de las urnas, que en el 2019 dieron la victoria al PSOE y Unidas Podemos, lo que permitiría tener mayorías progresistas en las cúpulas judiciales.
Dicho esto, Sánchez ha querido enviar un mensaje de "serenidad" hacia todos aquellos ciudadanos que, según su opinión, se sienten "indignados" y "preocupados". En esta misma línea, ha afirmado que el estado español "es una de las grandes democracias europeas" y que es por eso que tiene "mecanismos" para superar situaciones de este tipo. Ha sido entonces cuando ha asegurado que, aunque la intención de la Moncloa es acatar el pronunciamiento del Constitucional, tomará las medidas que hagan falta para renovar este mismo tribunal. "El Gobierno garantizará el respeto a la ley y al mandato constitucional", ha aseverado Sánchez.
La comparecencia de Pedro Sánchez ha llegado al día siguiente que el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, reaccionara a la intromisión del Tribunal Constitucional en el Congreso de los Diputados y el Senado. En una declaración institucional, el también ministro de Relaciones con las Cortes, afirmó que el ejecutivo de PSOE y Podemos mantendría su "lealtad institucional", asegurando que la decisión del tribunal de garantías tiene que acatarse.
Bolaños también cargó contra el Constitucional en su declaración, reiterando que los hechos eran de una "gravedad máxima" y que la decisión se había tomado con un "procedimiento insólito". "No es un conflicto entre partidos ni entre instituciones, sino entre aquellos que queremos cumplir la Constitución y aquellos que la incumplen sistemáticamente desde hace cuatro años; muchos nos hemos preguntado los motivos por los cuales el PP quiere paralizar esta renovación, todos nos las imaginamos, pero lo que ha pasado hoy da una nueva respuesta clara a esta pregunta".